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Martes 3 de julio de 2001 | |
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Un familiar convenció a Ruiz de entregarse |
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El sospechoso se habría escondido en unos tamariscos con su hijo. Llamó a un familiar para darle el niño y huir, pero éste lo convenció de no hacerlo. |
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| CATRIEL (ACA).- Con la detención de Diego Ruiz, de 20 años, y principal sospechoso de asesinar a Prudencio Cerna y de provocar lesiones graves a Delfina Ortíz y a Sara Cerna, la Policía considera cerrado el violento asesinato que conmocionó a los vecinos de esta ciudad petrolera. Con el correr de las horas, los investigadores tuvieron más precisiones sobre lo ocurrido, por lo que se supo que el ataque no fue con una barreta -elemento que se mencionó a las pocas horas de ocurrido el hecho-, sino con el caño de un rifle. Según fuentes confiables, el sospechoso se habría escondido desde la mañana en unos tamariscales a la vera del río Colorado, a unos 400 metros al sur del lugar donde ocurrieron los hechos. Al atardecer, Ruíz habría llamado a un familiar para entregarle el niño y huir, pero fue convencido por su pariente para que se entregara a la Policía. Pese a las distintas versiones, el sospechoso habría llegado con el bebé en el auto del familiar a la comisaría Novena, donde finalmente se entregó sin oponer resistencia. En esta Unidad se encuentra alojado y hoy sería trasladado a la alcaidía de Roca, donde quedará a disposición del juez Emilio Stadler. Algunos trascendidos indican que Ruíz, en el momento de su arresto, mantuvo una frialdad y serenidad sorprendentes. Se conoce, además, que el sospechoso es oriundo de la localidad bonaerense de Ameghino, y que habría llegado a la zona hace unos tres ó cuatro años, tiempo que entabló relaciones con su vecina, Sara Cerna. Esta relación no habría sido del agrado de los padres de la joven, pero nada hacía presumir la tragedia que luego se avecinaría. Hoy todo era estupor e incredulidad en Catriel, y sobre todo en el Barrio Santa Cruz, donde los vecinos no salían de su asombro. "Yo conozco a toda la familia Cerna, son muy buenos vecinos, gente normal, de su casa" comentó una residente del lugar. Algunos vecinos recuerdan al sospechoso como "un chico callado, tranquilo". Otro habitante del barrio lo recordó como "alguien que no se metía con nadie, pero hacía tiempo que no se lo veía por acá". Con respecto a la salud de Delfina Ortíz, sigue con pronóstico reservado en un centro asistencial de Cipolletti; en tanto que su hija Sara ya se encuentra fuera de peligro, y sería trasladada nuevamente al hospital local para su recuperación definitiva. El trágico hecho ocurrió en la madrugada del domingo en la vivienda de los padres de la joven, quien había mantenido una relación sentimental, pero que al parecer había finalizado. El detenido y la muchacha tenían un hijo de un año y medio, quien apareció con el sospechoso cuando se entregó en la comisaría. En la vivienda también se encontraba otro hijo de la muchacha, aunque no sería de Ruíz. Este pequeño, al igual que su hijo, no sufrió ninguna lesión y fue hallado durmiendo. |
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