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BUENOS AIRES (Télam).- La confianza que otorga un cóctel que mezcla buen juego y resultados positivos sobrevuela el aire que respira el seleccionado argentino Sub-20, que se prepara para la final del Mundial, mañana ante Ghana, bajo un clima apacible que sólo ofrece algunos ligeros interrogantes.
El tránsito a la final forjado por los goles de Javier Saviola y el brillo de otras individualidades alcanzó a aplacar las dudas que, en otras circunstancias, hubiesen sembrado la ausencia de un hombre clave, el zaguero Fabricio Coloccini, y la envergadura del rival, Ghana, que hace rato dejó de ser sorpresa en el campo del fútbol juvenil.
Estas sensaciones también se perciben fuera del plantel que moldeó José Pekerman y se reflejaron en las boleterías: minutos después del mediodía se agotaron las 9.400 localidades populares y 8.000 plateas disponibles en los estadios de Vélez Sársfield y Ferro Carril Oeste. La expectativa no es casual. Se apoya en los arrebatos de audacia de los chicos del seleccionado y en los antecedentes que marcan un denominador común en los equipos de Pekerman.
El técnico dedica estas horas a dilucidar los problemas que le ofrece la final contra los africanos.
Coloccini acumuló su segunda amarilla en la victoria sobre Paraguay y representará una baja sustantiva para el seleccionado.
La solvencia y experiencia del ex zaguero de Boca y San Lorenzo no parece tener equivalencias con las virtudes de otro jugador en su puesto del plantel.
Su reemplazante "natural" es Mauro Cetto, quien ingresó a los 27" minutos del segundo tiempo del encuentro contra los paraguayos, cuando Coloccini ya había sido marginado de la final por su segunda amonestación en el torneo.
Si no hay sorpresas, Cetto acompañará en la línea defensiva a Diego Colotto y Nicolás Burdisso.
En el puesto de arquero Pekerman ya experimentó con Germán Lux y Wilfredo Caballero . Ayer ambos trabajaron bajo la supervisión de Ubaldo Fillol, pero se presume que Caballero será confirmado.
Estos interrogantes, de todos modos, serán despejados el mismo domingo por Pekerman, poco antes del comienzo del partido, previsto para las 15.45.
El resto del esquema estará destinado a dominar el circuito de la pelota y complicar a los africanos que ofrecen su flanco débil en la tarea de la recuperación.
Por eso, del mediocampo al área rival el equipo no arrojará novedades: Estarán Julio Arca, Leonardo Ponzio, Nicolás Medina, Maximiliano Rodríguez, Leandro Romagnoli y Andrés D"Alessandro; Javier Saviola.
El estadio "Amalfitani" estará repleto
Después del caos vivido ayer, la jornada de venta de entradas para la final del campeonato Mundial Juvenil de fútbol se desarrolló ayer sin problemas y las 16 mil localidades disponibles en los estadios de Vélez Sársfield y Ferro se agotaron en pocas horas.
Como se esperaba, el "José Amalfitani" de Liniers estará colmado mañana, cuando los seleccionados Sub 20 de Argentina y Ghana definan el título mundial de la categoría.
La jornada se desarrolló sin problemas pese a la multitud que se reunió desde temprano, pero la idea de descentralizar al venta y dividirla en dos puntos ayudó a que no se repitiera el escándalo del jueves, que llevó a suspender la venta.
Las 6 mil plateas bajas y medias que se vendieron en Ferro y las 10 mil cabeceras puestas a la venta en Vélez se agotaron en pocas horas.
El expendio comenzó antes de las 10, aunque el horario previsto para el inicio era las 11, a raíz de la gran cantidad de gente que aguardaba desde temprano la apertura de las boleterías.
Las localidades debieron venderse el jueves de 11 a 19 en Vélez, tal como se hizo durante todo el torneo, pero la organización no tomó los recaudos necesarios para controlar la enorme expectativa generada por el equipo de José Pekerman en el público, que se volcó en forma masiva para conseguir boletos para la final.
Sin presencia policial ni estructura acorde, horas antes del inicio de la venta se generaron inconvenientes, agresiones y robos, no se respetaron los lugares y el clima se calentó.
En medio de la desorganización, el comisario Jorge Capecce anunció la postergación de la venta para hoy, y después la AFA informó que se haría en Vélez y Ferro.
El descontrol provocó declaraciones cruzadas entre la policía y el Comité Organizador Local (COL), por la responsabilidad en el control de la venta, pero hoy la jornada se desarrolló con normalidad, más allá de que muchos se quedaron si su ticket. (AR e Infosic).
Los africanos esperan el gran choque con alegría
BUENOS AIRES (Télam).- El seleccionado Sub- 20 ghanés de fútbol, que mañana se enfrentará con su par de Argentina por la final del Mundial de la categoría, se entrenó ayer por la tarde en un marco distendido donde abundaron las bromas y el buen humor.
El equipo africano arribó alrededor de las 16.15 a la cancha auxiliar del polideportivo de Vélez Sársfield y la primera nota de color la dio el delantero Razak Pimpong, quién descendió del micro vistiendo una camiseta argentina.
El resto del plantel, en un perfecto español y con mucha amabilidad, saludó con un "hola" a los pocos cronistas presentes en el lugar.
Otro punto que saltó a la vista de todos los presentes también estuvo relacionado con la vestimenta de los ghaneses, ya que la misma variaba en diferentes tonos de amarillo.
Como los africanos tuvieron problemas con la vestimenta (trajeron mangas cortas y los sorprendió el intenso frío) una casa deportiva de la ciudad de Mar del Plata, donde jugaron la primera rueda, les proporcionó un conjunto de indumentaria manga larga varios tonos más fuerte que la oficial.
Por esa razón, el amarillo de las medias, los pantalones y las remeras eran notoriamente diferente.
Los arqueros también aportaron algo de color a la fría tarde de Liniers. Así, Maxwell Banahene, el titular, entrenó con un buzo del arquero del Bayern Munich alemán, Oliver Kahn, y Ben Owu, el suplente, trabajó con uno del seleccionado de Estados Unidos.
Luego de formar una ronda en el centro de la cancha donde todos se tomaron de las manos y oraron -un ritual que los africanos practican siempre- comenzó el entrenamiento físico.
Arbitro español
BUENOS AIRES (DyN) - El español Manuel Enrique Mejuto González fue designado hoy para arbitrar el partido que mañana jugarán los seleccionados de la Argentina y Ghana por la final del Campeonato Mundial Juvenil "Argentina 2001".
Mejuto González será asistido por el griego Simeon Tsolakidis y el mexicano José Francisco Ramírez Díaz, en tanto que el cuarto árbitro será el hondureño José Benigno Pineda Fernández.
El español nació el 16 de abril de 1965 y es árbitro internacional desde el "99. En este tipo de campeonatos, ya dirigió en el torneo Sub-20 jugado en Ecuador, mientras que en este Mundial arbitró 3 encuentros: Japón-Angola, Paraguay-Irán y Ghana-Brasil.
Como árbitro Internacional "A" dirigió partidos entre selecciones mayores, como Italia-Noruega, y los encuentros por la edición de la Copa UEFA Feyenoord-Stuttgart, Parma- Dinamo Zagreb y Polonia Warszawa-Udinese.
La Argentina y Ghana se enfrentarán mañana, a partir de las 15.45 en cancha de Vélez Sársfield, en tanto que la jornada se iniciará a las 13 el choque Paraguay-Egipto por el tercer puesto del certamen, que será dirigido por el japonés Toru Kamikawa.
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