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Martes 24 de julio de 2001 | |
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Pintura como bandera de compromiso social |
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El pintor Carlos Montanelli y sus alumnos exponen "De pinceles y alaridos", donde se destacan obras de temática social con tópicos como la injusticia, los despidos y la corrupción. |
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| NEUQUEN (AN).- La pintura de Carlos Montanelli tiene un fuerte sello de compromiso social con aquellas causas que él considera justas. Es por ello que desde sus cuadros esbozados en estilo expresionista se pueden ver temas como la inseguridad, la corrupción, la mendicidad y la explotación de chicos. La muestra, que se llama "De pinceles y alaridos" representa esta obsesión del pintor por expresar "todo lo que duele en la actualidad y lo que está pasando en nuestro país", según se encarga de explicar el propio autor. El y sus alumnos exponen en la Biblioteca Alberdi (avenida Argentina y Alberdi) de esta ciudad y la muestra se verá durante quince días. "Lo mío es figurativo, son figuras y es un poco lo que expresa el pintor, en este caso yo", declara Montanelli, para aclarar que "esta debe ser mi exposición número cincuenta aproximadamente". De memoria recita su currículum: "Desde el año "72 vengo exponiendo en forma individual y colectiva. Nací en Capital Federal y estoy en el valle desde el "94 en Centenario. Aquí continué con la enseñanza del dibujo y pintura para niños y adultos y habitualmente una o dos veces por año, muestro lo que pinto". En este caso, para su autor, el eje conductor de la serie "son los problemas sociales más que nada, porque yo a lo mejor no sé hablar, no sé escribir, no sé componer, entonces me expreso o me quejo a través de mis cuadros". Siguiendo esa lógica implacable, las pinturas de Montanelli "entonces van a mostrar mi crítica, mi queja y lo que me duele como ser humano". "Creo que la pintura tiene que tener un compromiso -sostiene este artista- de lo que me duele como ser humano". Acto seguido, y como para corroborar sus dichos, muestra fotos de sus cuadros en los que se ven figuras como La Madre Teresa de Calcuta, las Madres de Plaza de Mayo, el escritor Ernesto Sábato y monseñor Jaime Francisco De Nevares. "Hay pintores paisajistas, pintores abstractos, pintores naif, pintores de distinto estilo, pero lo mío es el ser humano, lo que le pasa a la gente, que es más bien una pintura dramática", se autodefine. Como referentes que influenciaron en su arte, reconoce la labor de Demetrio Urruchúa. "Fue mi primer gran maestro, un gran pintor argentino y uno de los que pintó la cúpula de las Galerías Pacífico en Capital Federal". A la hora de definir tendencias, no duda. "Sí, mi pintura es figurativa y se puede decir que expresionista y mi principal técnica es el óleo". Con la intención de graficar de qué se trata lo suyo, trae a colación varios ejemplos. "Mis cuadros representan temáticas sociales, como por ejemplo el despido de obreros de la fábrica Indupa, un grupo de 87 operarios que fueron despedidos, después tengo el cuadro que muestra paredones donde hay grafitis, donde dicen por ejemplo "más plata para educación" y hay otro cuadro que habla de que "la cultura une la política separa", así como otro que muestra una manifestación". Entre los múltiples reconocimientos que recibió a lo largo de su trayectoria, figuran haber sido en seleccionado en 1975 para exponer en el LXIV Salón Nacional de Dibujo y Pintura . |
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