"Todavía me falta mucho por aprender"
"Un sueño divagante para mí sería grabar alguna canción para una película de Disney", confesó el joven folclorista lujanense que se presentará hoy a las 22 en el estadio Ruca Che.
La reflexión la esboza Luciano Pereyra, que habla de sí mismo en tercera persona, como si el fenómeno que generan sus shows y sus discos lo hubiera superado.
Satisfecho con la repercusión que tuvo su último trabajo "Recordándote", el joven folclorista lujanense que hoy a las 22 se presentará en el estadio Ruca Che confiesa que el de Neuquén va a ser un show "con todo lo que venimos presentando hasta ahora y con algunos temas nuevos del nuevo disco".
Luego de grabar para el programa "La Biblia y el calefón" y celular de por medio, este chico de respuestas prolijamente meditadas explica que "ya estamos con ganas de ir y hacer un show allá y más en Neuquén, donde a mi y a toda la gente que viaja conmigo nos han tratado siempre muy bien".
-¿Cuando saldría el nuevo disco?
-Ya lo empezamos a grabar, pero más a menos va a estar terminado y va a salir a la venta en dos meses y como cábala tenemos siempre dos días antes de que salga a la venta, recién ahí ponerle el nombre. Por ahora no tenemos nada de eso, pero sí puedo decir que hay alrededor de cuatro temas de mi autoría, no hay temas nuevos, hay temas de varios años, y nos vamos a seguir manteniendo y haciendo la misma línea que hasta ahora
-¿A qué le cantás esta vez?
-Hay temas muy románticos, un vals, una cueca dedicada a la provincia de Mendoza que es un lugar que yo conocí y le hice una canción hace muchos años y quería expresar eso en el disco grabándolo anteayer.
-¿Qué otros planes tenés?
-Vamos a seguir de gira acá en la Argentina, con este disco, que vamos a presentar oficialmente en un teatro de la provincia de Buenos Aires, y en todas las capitales del país, ya este disco se va por países limítrofes y en pocos meses más tenemos que ir ya a hacer la presentación en España de "Recordándote" donde ya salió.
-¿Viviste cosas muy fuertes para la edad que tenés, como cantar frente al Papa, como convivís con esas experiencias?
-Sinceramente uno no se puede dar cuenta hasta que lo vive. Me dijeron por ejemplo que en España mi disco vendió 2.500 placas, y hasta que yo no vea ese movimiento y cómo se trabaja allá, por ahí no me doy cuenta, pero lo tomo como una cosa más como mi trabajo, lo tomo así y como también tengo que disfrutar y estoy logrando cosas con las que yo siempre soñé...
-¿En el folclore actual rescatás a alguien en especial?
-Claro, a muchos artistas del país.
Dentro de la música nacional dos hombres que nos han dejado muy bien parados en el mundo, son tanto Horacio Guarany como Atahualpa Yupanqui, que son dos personajes que en Europa son muy conocidos.
En el mundo nos conocen gracias a ellos, como a varios cantantes que cada vez que uno visita otro país, se habla de ellos también, como el caso de Alejandro Lerner, en la balada, o Alberto Cortez y Facundo Cabral, que son personajes de los que se aprende escuchándolos...
-¿En quién reconocés influencias?
-En casi todos los que nombré. Además en mi casa siempre se escuchó música nacional, pero eso no quita que haya escuchado otros géneros. De los artistas argentinos lógicamente hubo una influencia de varios, porque en mi casa me enseñaron a escuchar y respetar a cada artista porque en definitiva cuando uno pone un disco está poniendo arte y eso me enseñaron a respetarlo y valorarlo mucho más.
-¿Qué asignatura pendiente tenés con tu música?
-Me gustaría estar en otros lugares y como un sueño quizás un poco divagante, me encantaría el día de mañana grabar alguna canción para alguna película de Disney, eso me encantaría, y quizás estoy a la espera de eso pero sin dejar de trabajar en lo que estoy haciendo que también me satisface un montón.
Extrañar los cosas sencillas
"Quizás estoy viviendo las cosas con otra panorámica y por ahí mis amigos mientras están pensando a qué boliche van a ir, yo estoy pensando en mi gira, en mi gente, en mis músicos y en que las cosas del sonido y la técnica estén bien", evalúa Luciano Pereyra.
Este chico prolijo y correcto, -seguramente el yerno que cualquier suegra quisiera tener- por momentos habla como si tuviera el discurso escrito y ninguna pregunta, por más trivial que sea, escapa al tamiz de su racionalidad.
"Es una responsabilidad que disfruto, aunque a veces me da nostalgia cuando son varios días arriba de un micro y digo: me encantaría estar este fin de semana con mis amigos saliendo a bailar, pero cuando estoy con mis amigos, pienso me gustaría estar de gira, entonces es un poco contradictorio, pero ellos lo entienden y por algo están conmigo desde el principio", razona pragmático.
Diplomático y siempre de cara al público, aclara que "cada vez son menos los espacios que uno se hace gracias a Dios porque hay trabajo en esta época del país y del momento que estamos viviendo". Tras aclarar que no es una queja ni mucho menos,cuenta que "aunque no tengo tanto tiempo para hacerme un espacio para el partido de fútbol y demás, siempre trato de reservarme los martes y jueves, para mi, para los deportes, mi gente, mi familia, que yo disfruto muchísimo". (AN).
Milena Delgado
Ediciones anteriores | Editorial | Artículos | Cartas de lectores || El tiempo | Clasificados | Turismo | Mapa del sitio
Escríbanos || Patagonia Jurásica | Cocina | Guía del ocio | Informática | El Económico | Educación
