Los ríos crecerán más y el drama ya se vive en Roca

El agua avanza sin tregua sobre las zonas ribereñas.

ROCA (AR).-Un par de llamas rodean las brasas de cuatro solitarias maderas. Ocho caras se miran entre sí y ninguno parece tener la respuesta. El agua del río se metió 20 centímetros adentro de sus casas y ahora tienen que "vivir" 150 metros más lejos del lugar en el que criaban a sus hijos y esperaban que alguien los viniera a buscar para darles trabajo. Y si bien les cuesta decirlo, todos tienen la certeza de que las crecidas los obligarán a pasar varias semanas allí antes de volver a sus viviendas.
Este es el panorama del barrio Buenos Aires Chico, en Roca, donde ayer las maquinarias no paraban de trabajar para impedir que todo empeore en los próximos días. Los informes oficiales hablan que el caudal será mayor en las próximas horas, máxime teniendo en cuenta las lluvias previstas para el fin de semana. "En Roca los problemas comienzan cuando el río supera los 1.800 metros cúbicos por segundo", comentó un funcionario del municipio días atrás. Ayer ya se comentaba que el fin de semana correrán por el Negro unos 2.000.
Buenos Aires Chico es sólo una postal de lo que viven todas las familias del Alto Valle que un día creyeron que el río no crecería nunca más en forma desmesurada. La instalación de viviendas en la zona ribereña fue incontrolable para las autoridades (en algunos casos por omisión) y hoy muchos pagan las consecuencias de haber perdido el desafío a la naturaleza.
Este pequeño asentamiento ubicado al final de la calle José Adaro se construyó sobre lo que antaño fue una laguna.Hace cinco días un vecino llamó desesperado por radio a los bomberos porque notaron que los riesgos a la integridad física eran serios. Allí comenzaron las tareas de construcción de terraplenes para impedir el avance del agua, pero era tarde: en la noche del miércoles cinco familias tuvieron que ser trasladadas a un salón que un vecino posee varios metros "más arriba".
Desde allí hicieron notar ayer a este diario su desesperanza. "No tenemos trabajo porque la temporada terminó y todos somos peones de chacra. A los chicos tuvimos que mandarlos al pueblo porque una nena ya se estaba enfermando y nos quedaremos acá hasta que baje el río, pero parece que no va a pasar nunca", señalaron los ocho mayores evacuados que al mediodía de ayer esperaban la asistencia alimentaria que les dio la municipalidad.
La única que se resistió a dejar su casa fue doña Yolanda Echegaray, que a los 77 años temió que le robaran sus animales y se quedó con su nieto en el islote en el que viven. Por la tarde y con la asistencia de los bomberos para cruzar el río, le llevaron ropa y comida.
Mientras tanto, las máquinas continuaron "a full" ayer en Buenos Aires Chico, y lo mismo ocurrió en Paso Córdoba, la isla 32, donde el DPA colaboró con Obras Públicas. Por su parte, el intendente Ricardo Sarandría recorrió la zona en avión junto al secretario Jorge Braccio para establecer la gravedad de la situación. Para el sábado está previsto un relevamiento en lancha junto a Prefectura.

Alerta en las costas neuquinas

NEUQUEN (AN).- Los equipos de salvataje de la municipalidad están en alerta y preparados para evacuar a las familias que residen en la zona cercana al río Limay. Ayer, el caudal era de 1.100 metros cúbicos pero las autoridades preven que aumentará a 1.400 en los próximos días, por encima del límite máximo de erogación de agua permitida a las concesionarias hidroeléctricas.
El alerta lo dio el subsecretario de Gobierno, Fabián Pelliza, al indicar que "puede haber problemas en el área de los clubes comprendidos desde el balneario Río Grande hasta la calle Linares, en calle Río Negro, sobre Linares cerca del balneario y en zonas ocupadas irregularmente".
"Nos preocupa la mayor erogación y consideramos que esto no entra dentro de lo que se puede considerar un caso fortuito, porque desde el verano la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas (AIC) dice que tendremos un invierno llovedor, con mucha agua en la cordillera", remarcó aludiendo a la responsabilidad de las concesionarias hidroeléctricas de la región.
Subrayó que de acuerdo a lo informado por la AIC al municipio, el lunes se erogarán 1.300 metros cúbicos por segundo, cuando la máxima permitida es de 1.290. A su vez, el boletín municipal recordó que la AIC advirtió que "el caudal del Limay podría trepar hasta los 1.400 metros cúbicos, lo que acarrearía inconvenientes".
Pelliza remarcó que personal de agrimensura y de defensa civil trabajan conjuntamente para determinar el área que quedará afectada por la creciente del río.

La lluvia elevará aún más los caudales

CIPOLLETTI (AC).- Si bien desde ayer los ríos Limay y Negro están registrando aumentos en sus caudales -para evitar que la represa de El Chocón ingrese lo más tarde posible a su Franja de Atenuación de Crecidas- nuevas lluvias en las altas cuencas referencian para el sábado, domingo y lunes caudales mucho más elevados en estos dos cursos de agua.
El martes y miércoles últimos el Limay corrió con 1.090 metros cúbicos por segundo, y 540 el Neuquén, con el Negro en 1.630 metros. En esos días se comenzó a notar el avance del agua sobre las costas, especialmente en los lugares más bajos.
En la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas se indicó que ayer el Limay llevó 1.130 metros, por lo que el Negro -sumándole los 540 del Neuquén- se condujo con 1.670 metros. Hoy seguirá el incremento, siempre para amortizar el impacto en las represas de Piedra del Aguila y El Chocón, de cara al frente de lluvia que se anuncia para el fin de semana y a la necesidad de liberar los saturados embalses.
Para hoy se esperan 1.170 metros cúbicos por segundo en el Limay y 1.710 en el Negro, con 535 en el Neuquén. Sábado y domingo el Limay estará en los 1.200 metros y el Negro en 1.740, mientras que el lunes se producirá otro pico ascendente, con casi 1.300 metros en el Limay, lo que llevará al Negro a caudales de 1.800 metros cúbicos por segundo.
Así dadas las cosas es inminente el ingreso de El Chocón a la Franja de Atenuación de Crecidas (FAC), cuestión que se está postergando con la erogación de mayores caudales desde Arroyito.
Con El Chocón en FAC, también la AIC tratará por todos los medios de que el Limay no supere aguas abajo de Arroyito los 1.300 metros -1.400 como opción de máxima- para que a su vez el río Negro no se escape de un caudal de 1.800/1.810 metros cúbicos por segundo.
Sin embargo, los integrantes de Defensa Civil de Roca consideraban como "muy posible" la llegada del caudal a los 2.000 metros cúbicos por segundo.
"Nosotros tenemos que preservar la seguridad de las represas pero también y la vida y bienes de las personas que habitan aguas abajo", dijo ayer el representante neuquino en la AIC, Elías Sapag.
La situación es atípica porque sería la primera vez desde el funcionamiento de las represas que tres de ellas -Piedra del Aguila y Chocón, en el Limay- y Loma La Lata, en el Neuquén, estén en la Franja de Atenuación de Crecidas. Y de cara a este cuadro, los contratos de concesión indican que dentro de esas franjas deben erogarse caudales tanto o más altos cuanto mayores sean los niveles alcanzados en cada embalse. Sin embargo, Sapag fue terminante, cuando aseguró que en la interpretación de normas las concesionarias quieren desembalsar caudales más altos aún, pero indicó al respecto que "haremos hasta lo imposible para que los problemas no sean más graves aún de los que son para la gente".

Anuncian un invierno normal en el país

BUENOS AIRES (Télam).- Con temperaturas muy bajas en todo el país, y particularmente en la zona central y norte, comenzó ayer la temporada invernal, que será normal: ni gélida, ni cálida, aunque se esperan jornadas con bajas marcas térmicas, según especialistas en el tema.
El licenciado en Ciencias Meteorológicas del Departamento de Ciencias de la Atmósfera de la UBA, Gustavo Escobar, informó que "de acuerdo a los modelos climáticos mundiales el invierno se presentará con temperaturas normales: ni muy frío, ni cálido".
"Tampoco se esperan períodos anómalos de 4 o 5 días seguidos con una temperatura media de 5 grados, como ocurrió el año pasado, aunque no hay que descartar que algunos días se presenten con temperaturas muy bajas", precisó.
"Durante las primeras semanas puede haber mañanas nubladas y húmedas con niebla" dijo y agregó que "en la segunda quincena de julio el clima se presentará más seco y se espera una irrupción de aire frío".

Fotos: El agua inundó el barrio Buenos Aires Chico y las chacras de la zona.