Martes 5 de junio de 2001

 

Toledo, en busca del consenso político para sacar al Perú de la crisis

 

Los últimos datos ampliaron su victoria.

  LIMA . - El presidente electo del Perú, Alejandro Toledo, inició ayer los preparativos para la transición hasta el 28 de julio y abrió la posibilidad de aceptar el "apoyo total" que le brindó el candidato perdedor Alan García Pérez en el balotaje del domingo.
Toledo amplió ayer a cinco puntos su ventaja sobre el candidato del Partido Aprista (PAP), Alan García, tras haberse escrutado más del 88 % de los votos , al obtener el 52% de los votos, y García el 47%.
El presidente electo de Perú llamó ayer a "todos los peruanos que creen en la democracia y no son corruptos" para participar en su futuro gobierno, que entrara en funciones el 28 de julio próximo, consciente que debe negociar un respaldo mayoritarios a su gobierno y asegurar la estabilidad del país.
Su principal contendor, el ex presidente Alan García, allanó el camino para la llamada concertación y prometió ayudar "con todo" al nuevo mandatario peruano, quien asumirá el cargo el 28 de julio, día de la independencia nacional.
La comunidad internacional y los mercados financieros saludaron ayer la victoria de Toledo , confiando en que pondría fin a una prolongada crisis política.
"Felicitamos al ganador, Alejandro Toledo. Esperamos trabajar productivamente con el nuevo gobierno", dijo en Washington el portavoz del Departamento de Estado norteamericano, Richard Boucher.
La moneda peruana, el sol, se fortaleció frente al dólar estadounidense, la bolsa de valores subió 3,71%y los bonos Brady peruanos se mantenían al alza en Nueva York.
El llamado al consenso hecho por Toledo no es casual. El nuevo mandatario deberá contar con apoyo suficiente de las fuerzas políticas en el futuro Congreso Nacional, así como poner orden en una estructura del Estado vulnerada por la corrupción, los intentos de perpetuarse en el poder del destituido Alberto Fujimori, y una creciente recesión que amenaza con paralizar gran parte del sector productivo nacional.
Toledo admite la magnitud de la crisis peruana, pero anunció una serie de medidas que podría contemplar la eventual aplicación de un "ajuste" económico.
La economía peruana está en recesión y apenas los inversionistas locales y extranjeros piensan seriamente en realizar inversiones fuertes en Perú.
Son muchos los problemas nacionales que Toledo debe abordar en el camino de su gestión de cinco años, principalmente sus relaciones con las fuerzas armadas, a cuyos altos mandos y oficiales les tendió una mano para consolidar la institucionalidad perdida en los cuarteles.
Esta es, tal vez, la más importante decisión política que adopte Toledo en los primeros 100 días para la ejecución de un programa mínimo a fin de enfrentar las ya embalsadas demandas sociales.
Los militares peruanos, cuyos altos mandos viven el trauma del desprestigio debido a que muchos se involucraron con la red de corrupción montada por Vladimiro Montesinos, ex asesor de Fujimori, se aprestan a subordinarse al nuevo mandatario.
Junto con el tema castrense Toledo tiene en sus manos un "compromiso social" con los desempleados y subempleados, que hasta el momento solo viven de las promesas electorales de generar empleo. Toledo ha prometido a sus electores generar las condiciones para ejecutar un programa, a corto y mediano plazo, que permita el desarrollo de proyectos económicos y de inversión.(ANSA/Reuters/EFE)

Invitó a "los que creen en la democracia y no son corruptos"

Lima (Télam-SNI).- El presidente electo de Perú, Alejandro Toledo, afirmó ayer que "todos los peruanos que creen en la democracia y no son corruptos" participarán en su futuro gobierno, que entrara en funciones el 28 de julio próximo.
"Aquellos que creen en la democracia y en la libertad y no son corruptos participarán en mi gobierno", dijo el líder del partido Perú Posible tras recibir en su residencia a Eduardo Stein, jefe de la misión de observación electoral de la OEA.
En sus primeras declaraciones de hoy tras su triunfo en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, donde derrotó al candidato del Partido Aprista Peruano (PAP), Alan García, Toledo subrayó su promesa de que "vamos a concertar con todos los peruanos".
En ese sentido, Toledo tendrá que negociar con otras fuerzas políticas si quiere conseguir un respaldo mayoritario a su gobierno y asegurar la estabilidad del país.
La segunda fuerza en el Congreso, con 28 escaños, es el PAP, liderado por García, la única agrupación política realmente organizada y disciplinada a nivel nacional en Perú, de los partidos que intervinieron en los comicios.
Pero según fuentes parlamentarias, Toledo ya estableció un preacuerdo con el Frente Independiente Moralizador (FIM), liderado por el congresista Fernando Olivera, con 11 escaños en el Parlamento, con lo que le faltan cuatro escaños para tener la mayoría absoluta.
Un acuerdo con Olivera, sin embargo, haría imposible pactar con el PAP, puesto que uno de los ejes fundamentales del pensamiento del líder del FIM es su irreconciliable enemistad política con García, a quien investigó por corrupción en 1990.
Para Toledo aún es "prematuro" hacer precisiones sobre su futuro gabinete ministerial. "No quiero soltar ningún nombre, van a tener sorpresas en tres o cuatro días", aseguró al término de su reunión con Stein.
Voceros de Perú Posible adelantaron que en 14 días Toledo tendrá listo el gabinete ministerial que lo acompañará a partir del 28 de julio en su gestión gubernamental.
Pero la mayor incógnita se centra en si el banquero Pedro Pablo Kuczynski, con vínculos en Wall Street y ministro de Energía en el régimen de Fernando Belaúnde Terry (1980-85), será quien asuma la decisiva cartera de Economía, partiendo del hecho que él lideró el equipo económico durante la campaña de Toledo.

La clave estará en el Congreso

Lima (EFE).- El presidente electo de Perú, Alejandro Toledo, tendrá que negociar con otras fuerzas políticas si quiere conseguir un respaldo mayoritario a su gobierno y asegurar la estabilidad del país.
En la primera vuelta, el pasado 8 de abril, el partido de Toledo, Perú Posible, no alcanzó la mayoría absoluta en el Parlamento, con 45 de los 120 escaños que lo conforman.
Perú Posible es, además, un partido nuevo, sin verdadero arraigo en sector alguno de la sociedad peruana y estructurado, hasta el momento, con propósitos únicamente electorales.
La segunda fuerza en el Congreso, con 28 escaños, es el Partido Aprista Peruano (PAP), liderado por García y única agrupación política en Perú realmente organizada y disciplinada a nivel nacional.
Las demás fuerzas representadas en el Congreso peruano corresponden, unas más que otras, a creaciones políticas impulsadas y nominadas con fines puramente electorales y cuyos líderes o cabezas visibles tienen difícil asegurar una mínima disciplina interna.
Este panorama puede tanto favorecer como entorpecer los intentos de Toledo por construir en el Congreso una mayoría absoluta duradera para su Gobierno, puesto que se puede ver obligado a negociar con los parlamentarios de otras fuerzas uno a uno, si es que no se producen además disidencias en el propio Perú Posible.

Cómo conciliar las demandas sociales y restaurar la confianza de los inversores

El presidente electo de Perú, Alejandro Toledo, deberá saldar en corto plazo las postergadas demandas sociales y conciliar con un dividido Congreso si pretende tener éxito en su gobierno, indicaron ayer varios analistas.
El desafío es mayor aún porque los peruanos están desilusionados luego de casi un año y medio prácticamente perdido entre una cuestionada reelección y la posterior destitución del ex presidente Alberto Fujimori tras estallar el mayor escándalo de corrupción que recuerde este país andino.
"Si en los primeros 100 días Toledo no ha comenzado a meter algunos goles, entonces ya comienza a reventar fuerte", dijo Augusto Alvarez, analista político de la consultora Apoyo.
Toledo gobernará un país envuelto en una crisis, donde tratará de cumplir las promesas de más empleos que hizo durante su campaña, en medio de posibles protestas sociales. Además, tendrá que lidiar con un congreso dividido y desacreditado por un reciente escándalo de corrupción que salpicó a casi todos los poderes del Estado con los videos grabados en secreto por el ex asesor de Inteligencia, Vladimiro Montesinos.
"De ahora al 28 de julio, Toledo va a articular un gobierno de unidad nacional (...) creo que no hay forma de gobernar este país si no hay un co-gobierno que comprometa a varias agrupaciones políticas", dijo el analista Santiago Pedraglio.
Los peruanos, que fueron a las urnas electorales cuatro veces en los últimos 14 meses, viven aún con el "mal" recuerdo de un gobierno de línea dura de Fujimori, quien dominó un Congreso que se limitaba a estampar sus reformas de libre mercado y de austeridad sin protestar, según analistas. Sin embargo, en el nuevo legislativo de 120 miembros ninguno de los partidos políticos tiene mayoría. (ver aparte) "Creo que buscar un acuerdo de agenda legislativa" será el primer tropiezo de Toledo en la planeada reforma de la actual Constitución, dijo Pedraglio.
Además, el nuevo gobierno tendrá poco espacio para aumentar los gastos, con un fuerte déficit -alrededor 1,5 % del producto interno bruto este año- y reducidas recaudaciones tributarias.
"El triunfo de Toledo es relativo y la ciudadanía no le ha dado un margen muy amplio", manifestó el analista Eduardo Toche. Una prueba de fuego para Toledo sería una huelga general de maestros programada para septiembre, según Mirko Lauer, editorialista del diario La República. "Hay una demanda real en el país. Hay aquí unas expectativas muy grandes de no sólo los pobres, sino también de los empresarios", afirmó Lauer. (Reuters)

Ganadores y perdedores

La jornada democrática en la que Alejandro Toledo fue elegido presidente dejó varios ganadores y pocos derrotados.
El Perú : Aunque sólo los años permitirán saber si la elección fue correcta, el país sale desde ya robustecido con el triunfo de la democracia, plasmado en unas elecciones transparentes, libres y justas. Recuperó la democracia sin disparar un solo tiro.
-Alejandro Toledo: Su estoica lucha contra el régimen pasado se coronó con un triunfo en las urnas. Ha obtenido la confianza que reclamó y ahora tendrá que disipar temores.
- Alan García: En enero tenía una intención de voto de dos por ciento y había un 70% que afirmaba que jamás votaría por él. Tras ser un cadáver político se adueña de una enorme franja de opinión y se pone en primera línea para 2006.
-Valentin Paniagua: Uno de sus encargos como presidente interino era encabezar un proceso ejemplar y ha cumplido con creces al igual que las autoridades electorales.
LOS PERDEDORES:
- El Fujimorismo: Ha quedado sepultado. Sus vociferantes ataques se quedaron sin éxito.
-El voto en blanco: Era una opción independiente y creciente ante los defectos de los dos candidatos, hasta que algunos sectores intentaron canalizarlo políticamente y se desplomó por debajo del promedio. Los periodistas Alvaro Vargas Llosa y Jaime Bayly, que intentaron liderarlo, tendrán que reducir las antipatías que despiertan si quieren hacer carrera política. (DPA)

Foto: Toledo saluda a la multitud junto a su esposa Elianne Karp y su hija, en la noche del domingo. Ahora comenzó una maratónica ronda de contactos con distintas fuerzas políticas para armar el gobierno y establecer alianzas en el Parlamento.

   
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