Martes 12 de junio de 2001

 

Primer juicio federal oral y público en Beltrán

 

El tribunal juzga a un hombre acusado de realizar copias ilegales de películas de video y alquilarlas

  LUIS BELTRAN (AVM).- Por primera vez se celebró ayer en Luis Beltrán un juicio oral y público ante un Tribunal Federal.
Los tres magistrados llegaron a la ciudad a realizar la audiencia debate en la que se juzgaba a una persona por violación a la propiedad intelectual.
El hombre fue acusado de hacer copias apócrifas de un video y alquilarlas. Tras el debate, y la presentación de los testigos, la fiscalía en su alegato pidió dos meses y medio de prisión en suspenso. La defensa, por su parte, solicitó la absolución. La audiencia sólo duró un par de horas y asistieron cerca de 30 personas a presenciarla.
El juicio se realizó en el hall principal del municipio, que fue especialmente acondicionado para la ocasión, al que pudieron acceder vecinos y curiosos hasta pocos minutos antes de que se iniciara el debate.
"La idea era que la mayor cantidad de público pudiera presenciar la audiencia", señaló un funcionario de la comuna. "Al principio se había pensado realizarlo en un lugar más amplio, pero luego pensamos que el municipio era un buen lugar para que se hiciera", agregó.
"Este es el primer juicio de estas características que se realiza en la localidad, ya que la denuncia había sido presentada justamente en Luis Beltrán. Antes, algunos años atrás, se había hecho un juicio penal, pero fue de la justicia provincial", resaltó la fuente comunal.
El tribunal federal, integrado por su presidente, Norberto Ferrando, y los vocales Ernesto Iglesias Hunt y Oscar Albrieu, juzgó a Sergio Rosso, acusado de violar la ley 11723, sobre la propiedad intelectual. La norma equipara esta violación a la estafa. Según las normas penales vigentes, este delito tiene sanciones que van desde un mes de prisión, a los 6 años.
Durante el juicio oral prestaron declaración en carácter de testigos: Dario Zwedick, quien además fue el autor en su momento de la denuncia, y Waldo Algañaraz, quien era comisario en la ciudad en la época en que se desencadenaron los hechos.
La denuncia fue realizada en 1996 cuando Zwedick, que era propietario de una casa de videos, denunció a Rosso por alquilar copias "truchas".
El testigo relató que hizo la denuncia por competencia desleal, porque Rosso en ese momento alquilaba las películas a 2 pesos y él a 3. Pero un día llegó a sus manos un video de los que alquilaba Rosso y descubrió que no era un original sino una copia. Luego fue Algañaraz quien prestó testimonio y relató haber hecho un allanamiento y haber secuestrado alrededor de 14 películas, supuestamente apócrifas.
Rosso se defendió argumentando que desconocía el tema y que cuando se hizo cargo del local tenía entre 2.500 y 3000 películas, y que desconocía que había algunas apócrifas.
En los alegatos, el fiscal Sabas Herrera pidió como pena dos meses de prisión en suspenso. Mientras que el abogado defensor, Samboni, pidió la absolución.
La justicia dará a conocer la sentencia el próximo día 19 en General Roca por la mañana.
   
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