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Sábado 2 de junio de 2001 | |
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Un preso grave por presunta sobredosis de pastillas |
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Sus compañeros no lo podían despertar.Está internado con pronóstico reservado. |
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| NEUQUEN (AN) - Un joven procesado por el homicidio de un policía fue encontrado en estado inconsciente por sus compañeros de pabellón de la Comisaría 19 del barrio Confluencia. Cerca del mediodía de ayer alertaron al carcelero de que el prisionero "no se despertaba". Como no respondió a los primeros auxilios fue llevado de urgencia a un centro asistencial, donde anoche permanecía en la sala de terapia intensiva con diagnóstico de "pronóstico reservado". La gravedad de cuadro que presenta y el desconocimiento de las causas que motivaron su estado generó todo tipo de interrogantes. La expectativa se acentuó ante la versión, extraoficial, que indica que el resto de los internos comentó que el joven venía mostrando signos de estar "empastillado" -consumo de fármacos para drogarse-, desde hacía varios días. Se trata de Luis Enrique Velázquez, de 21 años, a quien se lo acusa de estar involucrado en el asesinato del sargento primero Néstor Alfredo Sepúlveda (46 años), a quien acribillaron a balazos en agosto del año pasado en el destacamento del barrio Don Bosco. Por ese hecho hay varios sospechados (ver aparte). Velázquez está internado en el Policlínico Neuquén, donde tras una tomografía computada la doctora Elsa Pérez, a cargo de ese departamento, informó que el estudio arrojó un "resultado normal". Ahora se aguardan las conclusiones de los análisis de sangre y orina, entre otros estudios que se le practicaron a lo largo del día. "Por ahora sólo se tiene ese panorama en cuanto al estado del interno y sólo resta esperar nuevos informes para conocer qué le provocó el estado inconsciencia", dijo una fuente policial. Los compañeros de Velázquez comentaron a los investigadores del caso que el joven venía manifestando un estado de "adormecimiento, atontamiento e incoherencia en sus actitudes y expresiones", desde tiempo antes. Era habitual en los últimos tiempos, siempre según la versión que dieron a la Policía los otros presos, que el procesado se quedaba a dormir por muchas horas y "costaba despertarlo". Ayer no presentó ninguna lesión física, según determinaron los médicos. Ayer, sin embargo, los otros detenidos no lograron reanimarlo y dieron aviso a las autoridades de la alcaidía. Primero se lo envió a la sala de primeros auxilios del barrio, luego al hospital Castro Rendón y ante la gravedad de su estado se los derivó al policlínico. Velázquez ocupaba, solitariamente, la celda 1 del pabellón. El comisario a cargo de la alcaidía, Héctor Morales, dispuso el inmediato traslado del paciente y puso en marcha una investigación que quedó en manos del fiscal Walter Trincheri y el juez Juan José Gago. El sumario policial, en tanto, está a cargo del comisario general Juan José Jil, quien ordenó la evacuación del pabellón y ordenó una serie de medidas tendientes a esclarecer el episodio. Una inspección del pabellón no arrojó resultados en cuanto a observar indicios que pudieron conducir al esclarecimiento del hecho. "Todos los internos ha sido sometidos a exámenes médicos y no se ha detectado ninguna situación irregular", informó la Policía. Un crimen que dejó su marca NEUQUEN (AN) - El alevoso crimen del sargento primero Néstor Sepúlveda, en la madrugada del 16 de agosto del año pasado en el barrio Don Bosco, provocó un cimbronazo en las filas policiales. Los asesinos ingresaron al destacamento, le apoyaron el arma en la cabeza y lo fusilaron. La víctima estaba sola. |
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