Se prepara una gran renovación en el plantel de Boca

A pesar de los ecos de la gran fiesta "xeneize", los directivos de Boca ya están preparando una lista de jugadores que dejarían la entidad antes del comienzo del próximo torneo Clausura. Hoy caducará el contrato de su máxima estrella Juan Román Riquelme y su futuro estaría prácticamente asegurado en el Barcelona. Los que sí estarían en condiciones de emigrar a clubes de Europas son Jorge Bermúdez, Mauricio Serna y Cristian Traverso.

Pekerman no escatimó elogios para el bicampeón

El técnico José Pekerman consideró ayer que la consagración por segunda vez consecutiva de Boca Juniors como campeón de América es un ciclo "fantástico y maravilloso" que enorguellese al fútbol argentino.
"El ciclo de Boca es maravilloso, es fantástico, no sé si en la historia si se podrá repetir algo así. Este ciclo es un orgullo para el fútbol argentino", declaró el técnico, sobre el triunfo de Boca sobre Cruz Azul en la final del certamen continental.
Pekerman destacó que Boca "hizo algo muy difícil de repetir" y destacó en nivel de juego del equipo dirigido por Carlos Bianchi "para jugar los partidos decisivos. No es muy fácil ir perdiendo y llegar a la serie de los penales y contar con jugadores con mucha personalidad y eso tuvo Boca antenoche".
El técnico comentó que el zaguero de Boca Nicolás Burdisso "sufrió mucho" al observar el partido por televisión desde el predio de Ezeiza, donde está concentrado con el plantel del seleccionado juvenil.
Y contó que luego de la definición por penales, que determinó la consagración del equipo de la Ribera, fue felicitado por todos sus compañeros.
En principio se especuló que Burdisso concurriría a la "Bombonera" para alentar a sus compañeros, pero cuerpo técnico del equipo argentino determinó que lo mejor sería que permanezca concentrado con sus compañeros.

Bianchi, consiguió seis títulos en sólo tres años

BUENOS AIRES (DyN) - No hubo fútbol ni ideas. Apenas la dignidad para, a los empujones, acercarse al empate en el último tramo. Cruz Azul fue mejor, más prolijo, jugó en bloque. Boca, para ser campeón de América, necesitó otra vez y ahora inesperadamente llegar a los penales (de las cuatro veces que consiguió el trofeo, tres se definieron por esa vía).
Está claro que, para hablar de los méritos de esta campaña, habrá que referirse a cualquier cosa menos a este último partido, en el cual estuvo a punto de tirarse por la borda todo lo que con mucho sacrificio se construyera a lo largo del proceso anterior.
Vale comenzar por esa notable marca: cinco victorias en siete presentaciones como visitante, una más por penales y sólo una derrota cuando ya no contaba (Boca estaba clasificado.
En cambio, con la sola excepción de aquella gran noche frente al Vasco da Gama, cada partido en la "Bombonera" fue un parto. Cuando tuvo la obligación de situarse como dominador de campo y terreno, afloraron las carencias, esas que hablan de escasas variantes en ataque, de cierta rutinaria manera de querer ser ofensivo, de una poco recomendable Riquelme-dependencia.
Al cabo, los penales, que ya se han constituido en una especialidad de la casa, permitieron que la imponente multitud que colmó el estadio y que a lo largo de los noventa minutos había quedado atragantada de incredulidad, al límite del estupor, diera rienda suelta a la fiesta para la cual se había convocado.
Más allá de Riquelme, que evidentemente dolorido se quedó hasta el final y abrió el camino desde los once metros, los abanderados fueron los de siempre.

Se fueron amargados

BUENOS AIRES (Télam). El plantel del Cruz Azul, que antenoche perdió la final de la Copa Libertadores ante Boca, regresó ayer al mediodía a su país con una ambigua sensación entre la amargura y la conformidad.
"Estamos doloridos, pero sabemos cada uno de nosotros que hemos dejado todo en la cancha. Nos faltó muy poco, por eso regresamos conformes a México, pero no contentos", dijo Francisco Palencia.
Sobre los merecimientos de uno y otro para obtener la Copa, Palencia, quien convirtió su remate en la definición, fue muy claro "aquí no se puede hablar de justicia o injusticia, Boca pateó bien los penales y Cruz Azul no".
Al termino de los 180 minutos de ambas finales, todo quedó 1 a 1 y según el delantero mexicano ello habló a las claras de la paridad entre los finalistas.
"Los dos equipos son muy parejos, tienen mucha calidad y juegan de manera similar, fue un empate global y en los penales Boca fue un merecido campeón", añadió Palencia en la aeroestación de Ezeiza.