Jueves 14 de junio de 2001 | ||
|
Argentinos no ganó por culpa de Madorrán |
|
El árbitro no convalidó un legítimo gol. |
||
CORDOBA (DyN) - Sólo el desastroso arbitraje de Fabián Madorrán, que no convalidó dos goles conseguidos en forma legítima y que al final del encuentro protagonizó un escándalo pocas veces visto, le impidió a Argentinos Juniors llevarse una victoria que le hubiera otorgado grandes chances de permanecer en primera, aunque el 0 a 0 conseguido ayer ante Instituto lo dejó muy cerca de lograr ese objetivo. Después de ver las patéticas imágenes del final, con un Madorrán fuera de sí, peleándose con jugadores de Argentinos y el técnico Sergio Batista, resulta complicado contar lo que sucedió a lo largo de los noventa minutos de juego. Instituto comprendió desde el principio la trascendencia de este encuentro y obró en consecuencia. Pero se encontró con un Argentino decidido a buscar el empate, que le cerró todos los caminos al arco de Raúl Sanzotti. El centro fue el arma elegida por Instituto y ahí estuvo la equivocación del equipo dirigido por Gerardo Martino, porque salvo un cabezazo de Rubén Ríos que se fue apenas desviado, no creo demasiadas situaciones de riesgo. Esta contingencia fue bien aprovechada por Argentinos, que teniendo mucho menos la pelota, estuvo mucho más cerca de llegar al gol. Un cabezazo desviado de Diego Bustos y un remate de Sebastián Pena que desvió Javier Klimowicz fueron las más claras que tuvo el equipo de la Paternal. Esta tendencia, es decir Instituto al ataque y Argentinos a la espera, se repitió en el complemento, pero con una sustancial diferencia: esta vez cuando el "bichito" llegó al arco cordobés, convirtió, aunque cueste creerlo porque el partido terminó empatado en cero. Corrían 8 minutos, cuando desde el sector izquierdo del ataque de Argentinos llegó un centro. Alberto Yaqué saltó apareado con un defensor y cabeceó mandando la pelota al fondo de la red. Era gol, porque Yaqué no cometió foul sobre el defensor y si el arquero quedó pagando fue porque salió a cazar mariposas. Ese era el gol que para Argentinos representaba la permanencia en primera, pero no, no fue el gol que Batista y sus jugadores esperaban. Madorrán lo anuló y cobró un foul que sólo él vio. El partido se fue diluyendo en medio de la impotencia de Instituto por conseguir el gol que buscaba y el conformismo de Argentinos que cerraba su negocio, hasta que llegó la jugada que desató el escándalo del final. Minuto 48 (es decir ya se llevaban jugado 3 de descuento), Argentino inició un contraataque, que culminó en los pies de Federico Insúa (ingresó a los 29 del primer tiempo por Pérez Castro), quien sacó un zurdazo violento que pegó en el travesaño y la pelota picó dentro del arco casi un metro. Todo Argentinos gritó el gol, pero Madorrán (esta vez con la colaboración del línea Darío García) se volvió a equivocar y no lo convalidó. El pitazo final pareció que iba a terminar no sólo con el partido sino también con el bochornoso arbitraje de Madorrán. Pero no, todavía quedaba espacio para algo más. Cuando iniciaba la retirada, el árbitro, fuera de sí, se abalanzó sobre Mariano Herrón para expulsarlo y en el medio cruzó palabras con el "Checho" Batista, y a poco estuvieron de pelearse. Quilmes se sacó la mufa y dio un paso importante |
||
® Copyright Río Negro Online - All rights reserved
|
||
Ediciones anteriores | Editorial | Artículos | Cartas de lectores || El tiempo | Clasificados | Turismo | Mapa del sitio Escríbanos || Patagonia Jurásica | Cocina | Guía del ocio | Informática | El Económico | Educación |
||
|