Cáceres le escapó a los roces y festejó

Aprovechó un toque de Saladino y Cimolai para lograr la victoria.

CENTENARIO (AN) - Rubén Cáceres presentó un auto con buen ritmo y sacó provecho de los "roces" de quienes lo precedían, para lograr su primera victoria de la temporada en el TC Neuquino. La cuarta presentación de la categoría, en el autódromo de esta ciudad, convocó a unos tres mil quinientos espectadores y resultó de un entretenido desarrollo.
El ganador había tenido buenas actuaciones parciales en las fechas anteriores y ayer, en una carrera "revuelta", logró una ganancia impensada tras el toque entre Pablo Saladino y Emilio Cimolai. Los dos últimos fueron las figuras salientes de la jornada.
A pesar de la tarde gris y la amenaza de lluvia, la convocatoria de la Asociación Automovilística Centenario Competición, fue un verdadero éxito. La fiscalización de la prueba corrió por cuenta de la Federación Neuquina de Automovilismo.
Lo mejor, sin dudas, estaba en el "mano a mano" entre Cimolai con la Chevy y Saladino a bordo del Torino, quienes fueron protagonistas de los mejores momentos en el trazado de tierra de la "Colonia". Habían ganado sus series con diferencia.
Los otros que se anotaban con posibilidades eran Cáceres, Damián López, Eduardo Pino y Alejandro y Mario Gallego.
En la final, Cimolai arrancó como para quedarse con la gloria, condujo a fondo, concentrado y en búsqueda de una victoria en su ciudad. Lo seguía Saladino, quien no le perdía pisada, siempre "palo y palo", sacándose chispas en todo momento.
Saladino le mostraba el auto en todos los sectores. Así durante las trece primeras vueltas, mientras detrás se ubicaban López, Cáceres, Ricardo Mangini, Eduardo Luqui y M. Gallego.
El desenlace fue en el giro catorce, al fondo de la recta principal y en un lugar comprometido, Saladino tocó la cola de la máquina de Cimolai, desacomodó al puntero, que hizo un trompo y se fue afuera. Retomó la marcha tercero.
Saladino se hizo de la punta, pero el comisario deportivo evaluó que fue una maniobra antirreglamentaria y una vuelta después le mostró la bandera negra. Cáceres heredó la primera colocación, que cuidó sin problemas hasta la bandera a cuadros.
Más atrás, Cimolai resignado a lograr el segundo puesto y en tercera posición Mario Gallego, quien superó autos hasta quedar prendido para subir al podio.
Pasó la cuarta fecha del TC Neuquino en la que el líder del certamen sigue siendo Saladino, aunque sus rivales sumaron bien y achicaron diferencias.

El reglamento en discusión

CENTENARIO (AN) - La diferencia que marcó Pablo Saladino en la prueba de clasificación que se cumplió el pasado sábado en el circuito de Centenario, donde le sacó casi un segundo a su escolta, abrieron otra vez la polémica reglamentaria.
Fueron varios los que opinaron que hay que analizar la cuestión en relación con el Torino, que en esta temporada ganó dos pruebas y en las otras dos estuvo bien adelante, tanto en la clasificación, como en las series y finales.
Habrá que ver si las voces que se escucharon en los boxes se traducen en un pedido concreto ante la comisión técnica, que ya tuvo que modificar puntos del reglamento para equiparar a los Ford Falcon con el resto de las marcas que están participando en el certamen anual del TC Neuquino.
Mientras algunos hablaron, Saladino apuntó que su Torino rinde a pleno porque trabajan mucho.

"Me costó un poco en el comienzo de la final"

CENTENARIO (AN) - Rubén Cáceres y su equipo festejaron, con marcada emoción, este triunfo en el TC Neuquino. Para el piloto local era muy importante vencer en su ciudad y llevarse el premio que recordaba a "Alberto "Tito" Echavarri". Pasó mucho tiempo sin subir a lo más alto del podio.
En el análisis de la carrera, Cáceres sostuvo que "me costó un poco en el comienzo de la final, porque todos transitaban muy juntos. Emilio (por Cimolai) y Pablo (por Saladino) venían trabajando a la par y yo trataba de seguir el ritmo, algo que logré sólo en algunos momentos, después se alejaban".
Cáceres contó con un medio mecánico muy bien equilibrado, lo que fue un mérito de "todos los muchachos del taller, que trabajaron mucho y pude tener un ritmo parejo. Por suerte, se me dio faltando muy poco y no cometí errores, por lo que tengo una gran alegría. Este triunfo es para todos los que colaboran en el auto".
Emilio Cimolai se lamentó por el "roce" con Saladino, porque "estaba en condiciones de ganar por primera vez en el TC Neuquino y, además, en mi ciudad, lo que hubiera sido muy bueno".
Acerca del toque, sostuvo que "en el curvón ligero Saladino ya me había tocado unas vueltas antes, pero en esta oportunidad me desacomodó el auto, me siguió empujando y no me largó. Fue "fulero" porque veníamos muy rápido".
"Está todo bien, si me hubiera ganado el puesto él solo, pero me pasó también Cáceres y, lamentablemente, fue un toque bastante desgraciado", apuntó Cimolai minutos después de terminada la prueba y mientras recibía el saludo de los aficionados.
Saladino también dio su versión del incidente con Cimolai. "Lo respeté durante toda la carrera, ponía el auto por afuera y me barría, me cambiaba, entonces iba por adentro y me cerraba. Dos veces le mostraron bandera azul", apuntó el piloto y dirigente del TC Neuquino.
Saladino, uno de los defensores de Torino, calificó a la bandera nega de "injusta", porque "en el toque, intenté por afuera, por adentro, él se cerró y me pega a mí. Creo que se equivocaron, de todos modos si la comisión la vio así, no hay nada que hacer".
A su turno, Mario Gallego comentó acerca de su tercer puesto que "fue bárbaro, estamos muy contentos por que salieron bien todos los deberes. Largamos desde el fondo y llegamos adelante. Más no se puede pedir".

CENTENARIO (AN).- Una vez más no se pudo largar el certamen por los puntos en el TC-1100. Ayer se presentaron seis pilotos para una exhibición, donde el primer puesto quedó en manos de Pablo Costanzi.
Los que estuvieron en pista transitaron muy juntos y esa es una buena perspectiva para la especialidad, si se logran sumar más autos.
Esta nueva frustración, en algunos casos porque los pilotos no sacan su licencia deportiva, provocó el enojo de las autoridades.

Espectador de lujo: Uno de los espectadores de lujo que tuvo la cuarta fecha del TC Neuquino fue Gastón Dupuy, ya que tenía el domingo libre en su actividad a nivel nacional (compite en la Top Race). Aprovechó y junto a su familia disfrutó de un espectáculo que calificó de "muy bueno y espectacular". El joven piloto no pierde oportunidad para estar siempre cerca de los "fierros".

•Organización: La organización del festival fue muy buena y el único inconveniente se dio cuando culminó la programación, porque había demasiados espectadores en las puertas del parque cerrado, que impidieron el trabajo normal de los medios de prensa.
El programa se cumplió sin retrasos y minutos antes de las 16 ya estaban todos los autos en línea para comenzar la final del TC Neuquino.

Milano fueel vencedor, pero quedó en suspenso

CENTENARIO (AN).- El motor de Juan Milano no pasó la revisación técnica y la clasificación de la cuarta fecha de la Promocional 850, que se presentó ayer en esta ciudad, quedó en suspenso. La tapa de cilindros de la máquina del ganador fue observada y recién hoy puede haber una resolución de los técnicos de la especialidad.
Con esta victoria, por el momento sólo en la pista, Milano cortó con la racha que traía Roberto Bellomo, quien fue el único que en el circuito de Centenario estuvo en condiciones de discutirle el liderazgo.
Pese a no contar con un numeroso parque, una vez más, la categoría de los "fititos" volvió a ofrecer un buen espectáculo, porque siempre que hay fuerzas parejas se suceden los sobrepasos.
En esta ocasión fue en el segundo pelotón donde hubo más movimiento.
Milano había logrado el segundo puesto en la serie, detrás de Darío Scarpa que en la definición no pudo completar una vuelta.
El ganador sacó provecho de un auto veloz y también de los inconvenientes que debieron soportar varios de sus rivales, para quedarse con el primer lugar en el podio.
Detrás se ubicaron Bellomo, el debutante Jorge Grasano y Javier Escobar.