Viernes 8 de junio de 2001
 

Boca dejó escapar una buena oportunidad
 

El 2-2 con el Palmeiras dejó mejor parados a los brasileños.El mellizo se retiró lesionado y Barijho fue expulsado.
  Boca Júniors empató anoche como local ante el Palmeiras de Brasil (2-2) y ahora deberá apostar todas sus fichas en el encuentro de vuelta, para avanzar a la final de la Copa Libertadores. Con este resultado, sin dudas, el más beneficiado fue el conjunto brasileño, que eligió el estadio del Parque Atártica para el desquite de la semana próxima..
Palmeiras dejó bien en claro cual iba a ser su esquema de juego para llevarse un buen resultado de "La Bombonera" y ese fue el de ubicar a Galeano muy cerca de Riquelme para no dejarlo armar el juego. Así fue que Boca careció de llegadas concretas en la primera etapa y la visita abrió el marcador a los 19 minutos, a través de Alex.
De a poco, el local se acomodó en el campo de juego, el mellizo Barros Schelotto buscó hacer la diferencia con sus desbordes y Riquelme comenzó a encontrar espacios libres. Y de tanto insistir, llegó el premio para el dueño de casa, mediante un tiro penal del mellizo, a los 43 minutos.
En el segundo tiempo Riquelme tomó la manija y la balanza comenzó a inclinarse hacia el arquero Marcos, quien impidió en más de una oportunidad que el local tomara distancia en el marcador.
En esta etapa se vieron más llegadas y el encuentro se hizo más entretenido. Al minuto Giménez -ingresó por Barros Schelotto, quien se retiró lesionado y está en duda para el desquite- desbordó por la derecha y envió un centro que nadie pudo conectar. Tres minutos más tarde Ibarra probó desde lejos y Marcos respondió muy bien.
A todo esto Palmeiras esperaba sin desesperar y en una contra, Magrao habilitó a Fabio Júnior, quien ante la marca de Ibarra sacó el remate que pegó en el defensor y descolocó a Córdoba.
El 2 a 1 enmudeció a todos en "La Bombonera", aunque sólo por sesenta segundos, ya que Barijho finalizó una obra de arte de Riquelme con el tanto de la igualdad. El armador de Boca se metió en el área de Palmeiras y tras un par de amagues, habilitó al delantero para que la empujara al gol.
Después se vieron algunas llegadas más y tampoco faltaron las piernas fuertes.
Boca buscó un poco más que Palmeiras, pero el equipo visitante fue inteligente para llevarse un resultado positivo a Brasil.

El plantel viaja el lunes a Brasil

BUENOS AIRES (DyN) - El plantel de Boca viajará el lunes hacia San Pablo, donde el miércoles jugará el encuentro de vuelta de la semifinal de la Copa ante el Palmeiras. La delegación partirá desde el Aeropuerto de Ezeiza a las 18.20.
El martes, Boca tiene previsto entrenarse en el "Morumbí", estadio que le trae muy gratos recuerdos, ya que allí conquistó el año último la Libertadores, justamente ante el Palmeiras.
Sin embargo, el desquite se jugará en el "Parque Antárctica", donde el Palmeiras nunca perdió ante un rival extranjero.
Bianchi prefería jugar en el "Morumbí", un poco por cábala y otro porque allí la presión del público se siente mucho menos que en el "Parque Antártica", cuyas tribunas están muy cerca del campo de juego.

Rosario Central deberá cambiar la historia en el "Gigante"

MEXICO (Télam, enviado especial).- Rosario Central mantuvo en el terreno de lo factible su chance de alcanzar la final de la Copa Libertadores, pese a perder ante Cruz Azul de México por 2-0 en el partido de ida de una de las semifinales, que se disputó en el mítico estadio Azteca ante 115.000 espectadores.
El paraguayo José Cardozo, a los 35 minutos del primer tiempo, y Juan Palencia, de tiro penal, a los 30 de la segunda etapa, marcaron los goles del conjunto mexicano, cuya ventaja resultó escasa de acuerdo al desarrollo del partido.
El conjunto de Bauza terminó el partido con diez jugadores por la expulsión de David Pérez, a un minuto del final del encuentro.
Después de la hazaña lograda ante América de Cali, revertir un resultado de dos goles en el "Gigante Arroyito" y clasificarse finalista no es para Central un logro imposible.
El conjunto argentino, que fue claramente superado, terminó mirando con buenos ojos una derrota que todavía lo mantiene en carrera ante el mismo equipo que una semana antes había eliminado con autoridad a Ríver Plate.
La pretensión visitante de mantener el desarrollo del partido lejos de Laureano Tombolini fue posible sólo durante los 10 minutos iniciales, porque la inconsistencia de su línea de volantes propició que Cruz Azul se abalanzara sobre su defensa.
Como una semana atrás en Cali, el sector derecho de la última línea "canalla" mostró grietas y le abrió camino a Pinheiro, quien generó las mejores situaciones para su equipo.
De esa manera, los mexicanos nutrieron a su jugador más peligroso: el paraguayo Cardozo, quien tuvo a maltraer a Gabriel Loeschbor.
Si bien es cierto que un resultado adverso no es alentador para nadie, Central sabe de paradas difíciles y la semana próxima intentará revertir la historia.
   
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