Jueves 17 de mayo de 2001
		La provincia deberá reponer los árboles talados
		Además, tendrá que plantar, como resarcimiento, un cerco vivo de 400 metros en cercanías del aeropuerto de Neuquén
		NEUQUEN (AN).- Luego de la escandalosa tala por equivocación en los alrededores del aeropuerto de Neuquén, la dirección de Transporte de la provincia tendrá que resarcir con nuevos árboles y con la plantación de un cerco vivo de 400 metros de largo a los vecinos de los barrios Aeroclub y Ferroviario. La medida, aceptada de palabra por los funcionarios provinciales, se adoptó como compensación luego de la tala por error que ejecutó una cuadrilla contratada por Servicios Públicos. El resarcimiento tiene muy pocos antecedentes en esta ciudad, aunque llegó cuando unos 200 árboles ya habían sido cortados. Los vecinos de la zona sudoeste de la ciudad consiguieron detener a la brigada de motosierristas y arrancaron el compromiso de un resarcimiento a Transporte de la provincia, de quien depende el aeropuerto. El área de gobierno ordenó la tala para cumplir con el pedido de la Fuerza Aérea, que ve afectados con interferencias sus equipos de comunicación y orientación de aviones (sobre todo un VOR recientemente instalado) a raíz de la altura de las plantas que rodean al aeropuerto. La tala se hizo sin respetar pautas que establecían el corte parcial de algunas plantas y apenas el desrrame de otras. Los motosierristas avanzaron contra todos los árboles de esa zona -uno de los principales pulmones de esta ciudad- sin nadie que ordene y verifique el trabajo. Los vecinos reaccionaron con furia contra la invasión y luego de un rosario de reclamos consiguieron detener la tala. Sólo el delegado de la comisión barrial del barrio Ferroviario estaba se acuerdo con el corte de los emblemáticos árboles, porque ya tenía planeada la venta de la madera. Con todo, al cabo de una reunión de vecinos con funcionarios, la defensoría del Pueblo y el jefe del aeropuerto, se definió que un agrimensor de la provincia marque con precisión hasta donde se cortará cada uno de los árboles que quedan en pie. Una vez que los vecinos sepan cómo será el corte y den el visto bueno recién allí podrán continuar los trabajos. Como resarcimiento, la provincia tendrá que plantar un cerco vivo entre la alambrada que rodea al aeropuerto y el canal de riego que lleva agua a colonia Valentina Norte. La Defensora del Pueblo, Blanca Tirachini, consideró que la situación podría haberse evitado con sólo informar a cada uno de los vecinos. Tirachini estimó que la pérdida (estimada en 200 árboles) es "irreparable y ni siquiera sabemos el impacto ambiental que tendrá esta tala". Los árboles derribados representan un verdadero problema para el futuro de esta ciudad, donde se estima que "faltan" alrededor de 30.000 plantas. El año pasado, para construir un mega corralón, un hipermercado y un paseo de compras, se talaron decenas de añosos sauces y álamos sin que ni siquiera se acordara un plan de reforestación. Años más atrás, cuando se construyó la multitrocha, la misma suerte corrieron los árboles plantados a la vera de la ruta 22. "No sabemos qué sanción le corresponde, nosotros pasamos los informes a los abogados de la municipalidad, creería que cabe algún tipo de sanción para los que talan", estimó el secretario de Obras Públicas municipal, Armando Cattáneo, de quien depende Espacios Verdes.
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