Miércoles 23 de mayo de 2001

 

Quiroga modificó el contrato con Cliba

 

El nuevo convenio dispone la reducción de personal y del número de camiones afectados a la recolección de la basura. En contrapartida, Cliba no iniciará acciones contra el municipio.

  NEUQUEN (AN).- El gobierno de la ciudad modificó las condiciones contractuales del servicio de limpieza urbana y recolección de basura mediante un convenio que dispone, entre otras medidas, reducción de personal y del número de camiones afectados a las tareas. A cambio, la concesionaria Cliba renuncia a efectuar acciones resarcitorias contra la municipalidad.
Las modificaciones fueron acordadas el 15 de marzo pasado y refrendadas la semana siguiente mediante el decreto número 378 del intendente Horacio Quiroga, pero recién ayer se supo de la existencia de la reforma.
El concejal municipalista José Martínez planteará el hecho en el recinto y pedirá acompañamiento para exigir al gobierno local toda la actuación existente "con motivo de solicitudes efectuadas por la concesionaria" con relación a las modificaciones introducidas al servicio. También quiere saber si con anterioridad el municipio aplicó multas por incumplimiento a Cliba.
"No regalamos nada, por el contrario hay compensaciones" de servicio, defendió el convenio el secretario de Obras y Servicios Públicos, Armando Cattáneo. Dijo que los cambios obedecieron a que el régimen original "no se ajustaba a las necesidades", pidió "despolitizar el tema" y sostuvo que las nuevas pautas están cubiertas "operativa, ambiental y legalmente".
Pero el edil recordó que en oportunidad de aprobarse la transferencia del contrato de Garbo Sur a Cliba, el Concejo puso como condición dentro del marco general no despidos y el traspaso íntegro del personal.
Desde Cliba, después de reiterados llamados telefónicos, el sector de guardia dijo que el personal autorizado no regresaría a la empresa hasta hoy.
Entre otras variantes, el acuerdo entre el municipio y Cliba redujo de 21 a 16 el número de camiones compactadores y para ello amplió la recolección de basura en horario diurno -antes era nocturno- en el sector oeste principalmente.
Faculta además a la empresa a poner la cantidad de empleados que crea necesario y a incorporar maquinaria para el barrido de calles y veredas cuando el contrato fijaba como "personal mínimo" una operaria mujer cada 12 y 10 cuadras, respectivamente, por turno.
El transporte de contenedores al centro de disposición final fue blanqueado y se hace con un chofer por camión, por turno y por día. El dispositivo anterior obligaba el apoyo logístico con dos operarios. No obstante, el municipio se reserva la opción de agregar personal. De modo similar, el acuerdo faculta a Cliba a realizar la operación de incineración con un operario menos.
En cambio, el acuerdo mejora el servicio a los productores de residuos patógenos al incluir una báscula portátil para el pesaje de desechos peligrosos en los camiones. Por otra parte, suma al servicio de limpieza equipamiento preexistente.
En cuanto al retiro de elementos contaminantes y su transporte al centro de disposición final, el contrato establecía dos turnos por día, de lunes a viernes, en horarios definidos por la autoridad de aplicación. La modificación introducida lo transforma como una actividad "no rutinaria" y "eventual".
   
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