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Sábado 5 de mayo de 2001 | |
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Rotura de un ducto dejó sin agua a 40.000 neuquinos |
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Recién hoy por la noche quedará normalizado el servicio en el área centro oeste y los barrios Gama, Alta Barda y Fonavi. El caño roto lleva agua desde el Limay hacia un tanque-depósito. |
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| NEUQUEN (AN).- La rotura de un acueducto principal complicó el suministro del líquido a unos 40.000 vecinos de esta ciudad, quienes deberán esperar por lo menos hasta hoy a la noche para la normalización del servicio. La emergencia fue salvada, en parte, con una serie de maniobras mediante las cuales el personal del Ente Provincial de Agua y Saneamiento (EPAS) compensó el servicio a partir de derivaciones desde otros sectores de la ciudad. Los problemas comenzaron poco después del mediodía, y aumentaron a la tarde cuando en algunas casas se agotó la reserva en los tanques y de las canillas directas salía un delgado hilo de agua. El caño que se rompió transporta agua desde el río Limay -desde la planta ubicada en la calle Leguizamón- hasta el tanque depósito del barrio Alta Barda, que a su vez distribuye el líquido hacia otros sectores de la ciudad. En suma, los problemas de suministro alcanzaron al área centro oeste y a los barrios Gama, Alta Barda y Fonavi, un radio en el que, se estima, viven más de 40.000 neuquinos. El ducto se rompió alrededor de las 14 y las pérdidas se localizaron en la esquina de Gatica y 11 de septiembre, a pocos metros de las vías de Ferrosur. Allí, una decena de operarios con maquinaria especial trabajó durante diez horas seguidas para remedar la rotura. Se trata de una cañería de hierro de unos 40 centímetros de diámetro y de unos cuatro milímetros de espesor que cedió a la presión interna, producto de la fatiga del material. Tras la inmediata detección de la pérdida, se detuvo el bombeo desde el río, se vacío el interior del ducto, se realizó un corte del cilindro, y entrada la noche estaba prevista realizar la soldadura. El problema es que para restablecer el servicio pueden llegar a transcurrir más de 24 horas, el tiempo que se necesita para presurizar el caño y recargar los tanques. En este marco, el EPAS recomendó a todos los usuarios "racionar" el consumo de agua y no agotar la reserva de los tanques. "Más allá de los trastornos, estamos atendiendo la emergencia, si hubiera sido en verano podría haber sido una catástrofe", afirmó Horacio Carvalho el jefe de servicio del área Neuquén. En esta época del año, desde las bombas ubicadas en Limay se envían a la red unos 700.000 litros por hora, mientras que en la temporada estival se llega a los 100.000. Carvalho explicó que de acuerdo a las previsiones el servicio se comenzará a normalizar paulatinamente en horas de la tarde de hoy. En emergencia, con la apertura de algunas válvulas y el cierre de otras, el personal del EPAS consigue mantener el servicio derivando el líquido que se dispone para otros sectores. Un clásico Los caños de agua rotos son un clásico en esta ciudad. La mayoría de las veces los problemas se producen en las antiquísimas redes de caños de fibrocemento, como la que está debajo de la avenida Argentina. En este caso, explicaron los técnicos, "no es habitual que se rompan los ductos de hierro a pesar de que no son muy viejos". El problema es la altísima presión que hay en el interior de los mismos, dado que desde el río deben llegar hasta la zona de las bardas. |
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