Jueves 24 de mayo de 2001

 

Brasil: inician proceso contra senadores

 

Una comisión abrió el expediente a Magalhaes y Arruda por violar el secreto de voto

  Brasilia (EFE).- La mesa directiva del Senado brasileño definirá a mediados de junio si abre o no un proceso para destituir a dos legisladores involucrados en un sonado caso de fraude que ayer mereció la mayoritaria reprobación de la Comisión de Etica.
Con trece votos a favor y dos en contra, los miembros de la Comisión de Etica del Senado aprobaron la solicitud de apertura del proceso para despojar de sus mandatos al ex presidente del Congreso Antonio Carlos Magalhaes y al ex líder de la bancada oficialista en la cámara alta José Roberto Arruda.
La destitución acarrearía además a Arruda y Magalhaes la pérdida de sus derechos políticos en los próximos ocho años, lo que prácticamente significaría el fin de sus carreras.
Los siete integrantes de la mesa directiva del Senado, que preside Jáder Barbalho, se tomarán quince días hábiles para analizar la resolución, nombrar el relator y decidir si abre el proceso, emite sanciones alternativas a la destitución o archiva definitivamente el caso. Analistas políticos consideran que este excesivo periodo da "un nuevo aire" para los senadores en capilla, pues desde ayer pueden abrir nuevas negociaciones para obtener, al menos, penas más blandas, como la suspensión temporal de sus investiduras.
Si las negociaciones internas para frenar el avance del caso no fructificasen, los dos senadores deben renunciar a sus cargos, con lo que preservarían los derechos políticos para optar por otros cargos de elección a partir del próximo año.
El pedido de apertura del proceso de destitución de Magalhaes y Arruda fue presentado hace una semana por el senador Roberto Saturnino Braga, que dirigió la investigación del caso, y quedó refrendado hoy por otros doce miembros del Consejo de Etica.
Los votos contrarios fueron emitidos por dos correligionarios de Magalhaes, un cacique del estado provincial de Bahia (noreste) que ha mantenido su influencia en el poder hace cuatro décadas. En su informe final, Braga afirmó que ambos colegas lesionaron "el decoro parlamentario".
El resultado de ayer fue una seria derrota para los aliados de Magalhaes, líder del Partido del Frente Liberal (conservador), aliado al Gobierno del presidente del país, Fernando Henrique Cardoso.
También confirmó el estado de indefensión en que se encuentra Arruda desde que perdió su cargo de influencia en el gobierno y tuvo que renunciar al Partido de la Socialdemocracia Brasileña (PSDB), el mismo de Cardoso, a raíz de las denuncias.
Magalhaes y Arruda admitieron su responsabilidad en la violación del sistema informático del Senado durante una histórica sesión, en junio pasado, que terminó con la destitución del congresista Luiz Luiz Estevao de Oliveira, a quien la corporación investigaba por desviar recursos públicos.
Arruda, uno de los políticos en que más confiaba el presidente del país, Fernando Henrique Cardoso, y Magalhaes, un patriarca político de 74 años, aprovecharon su influencia para conocer la forma como votaron sus colegas.
   
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