La crisis acentúa la emigración de América Latina

Situaciones de guerra interna, como el caso colombiano, o de crisis económica, como la mayoría de los otros países, hacen que miles busquen una mejor vida en EE. UU. y Europa.

Argentina, un caso particular

El caso argentino es particular dentro de América Latina, ya que en los últimos años se acentuó la tendencia a la emigración de su población, mientras aún recibe anualmente miles de pobladores de los países limítrofes.
En Argentina se han hecho comunes largas filas, de un millar de personas diarias, frente a los consulados de España e Italia para pedir pasaportes, en un país que "desciende de los barcos" y que vive una aguda recesión.
Estimaciones de cancillería indican que medio millón de argentinos vive fuera del país, principalmente en Italia, España, países limítrofes y Estados Unidos (Miami).
La tendencia decreció este año en Uruguay, luego de que 57.000 personas se establecieron en el exterior el año pasado.
El caso chileno indica que la mayor parte de los inmigrantes (95%) proviene de Perú, aunque miles de connacionales vive en Argentina. En Bolivia 92.000 personas dejaron el país el año último rumbo a Estados Unidos y países limítrofes, principalmente Argentina.

Las trabas que pone EE. UU. no desalientan a los extranjeros

NUEVA YORK (ANSA) - Estados Unidos, desde fines del siglo XIX la meca de los inmigrantes perseguidos por el hambre, la persecución y la pobreza, restringió a sectores calificados la admisión migratoria, pero no puede evitar las oleadas de ilegales que buscan una solución a su angustia económica.
Los norteamericanos abrieron formalmente las puertas a la inmigración a fines de la segunda mitad del 1800, en el fulgor de la revolución industrial forjada la colonización del oeste y la fiebre del oro, pero en especial por el boom de siderúrgico, minero, bancario y ferroviario.
A Nueva York, frente a la estatua de la Libertad, llegaron más de 25 millones de inmigrantes, de los cuales sólo fueron admitidos 12 millones, predecesores de unos 110 millones de estadounidenses. Además de los puertos, las fronteras fueron y continúan siendo otras de las vías de acceso migratorio, y en particular la frontera sur, que sobre el río Bravo, separa a Estados Unidos de México.
Los inmigrantes de origen mexicano constituyen el 43% de la población hispana o latina llegada a Estados Unidos durante los últimos 30-50 años. Según el último censo, la población latina se constituyó en la primera minoría, desplazando a la denominada afro- estadounidense, con unos 36 millones de miembros y fue señalada como la de mayor crecimiento demográfico.
También llegan al país inmigrantes de Asia y Africa que aspiran a rehacer su vida y por lo que pagan a contrabandistas todos sus ahorros. Organizaciones de inmigrantes estimaron a fines del 2000 que viven en Estados Unidos unos 5,5 a 7 millones de indocumentados, cuatro millones de los cuales, serían de origen mexicano.
Periódicamente surgen protestas y movimientos reivindicatorios para acoger y conceder moratoria a los inmigrantes, pero pesa la tendencia a la restricción, en especial frente a la actual desaceleración económica
Existe una lotería anual de visas en la que, con una cuota de 50.000 inmigrantes, participan más de diez millones de aspirantes de todo el mundo. EE.UU. también concede unas 200.000 visas para trabajadores calificados.