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Más confusión en torno del partido de fútbol

Cuatro testigos dijeron cosas distintas; uno fue detenido y otro será investigado

CIPOLLETTI (AC).- Los jueces trataron de dilucidar ayer qué sucedió en el partido de fútbol femenino que se jugó el domingo 9 de noviembre de 1997. Convocaron a cuatro personas para ver qué sabían respecto de un Taunus verde con muchachones supuestamente ebrios que estaban entre los espectadores y les decían groserías a las jugadoras. Pero los testigos no se pusieron de acuerdo ni siquiera cuando los carearon. Uno de ellos, José Núñez, fue detenido por falso testimonio y otro, Sergio Zapata, será investigado por el mismo motivo.
Todo este confuso ir y venir de versiones es común en el expediente. Ayer el juez César López Meyer afirmó en tono crítico que "hay montones de declaraciones de gente que dice que alguien sabe, y cuando lo citamos dice que no sabe". Este fue un ejemplo más.
El primero que habló sobre un incidente durante el partido de fútbol y mencionó a un Taunus, a un policía llamado Sandro y a un delincuente de nombre Tulio, fue Dante Caballero, el hombre que encontró los cuerpos de las víctimas.
Caballero dijo que José Núñez le había contado el episodio. Pero Núñez no estuvo en el partido, sino que a su vez se enteró o por su hermano Miguel o por Zapata, entrenador de las chicas futbolistas. Miguel ya declaró que no sabía nada y Zapata retaceó información.
Al declarar ayer, Zapata relató que el domingo 9 estuvieron en la cancha entre las 11.30 y cerca de las 16. "El desarrollo era normal, mucha gente, mucho autos", señaló. Sin embargo Miguel Núñez, el colectivero que trasportó al equipo, había declarado en la audiencia anterior que había muy pocos vehículos.
"Me parece que uno o dos muchachos gritaron alguna estupidez a las chicas pero no pasó a mayores. Estaban apoyados sobre un auto viejo, verde oscuro. No eran conocidos", aseguró Zapata. Describió a uno de ellos como "rubiecito, medio gordo" vestido con "una camiseta de Boca". Caballero había mencionado que uno era policía y dio nombres: Sandro y Tulio. "Yo no los conozco", aseguró Zapata.
Luego declaró José Núñez, dueño del colectivo, quien durante la instrucción había suministrado datos contrarios a los que manifestó ayer. Si bien reconoció haber hablado con Caballero sobre el tema, cayó en contradicciones.
"Caballero dijo un montón de barbaridades. No le comenté algo que hubiera sucedido en el partido", manifestó Núñez, quien dijo desconocer los "piropos" que le hicieron las personas del vehículo a las chicas.
Núñez incurrió en varias contradicciones a lo largo de su declaración y el fiscal pidió que se lo detuviera por falso testimonio. El Tribunal hizo lugar a esta petición, y a la tarde lo careó con Zapata.
En esa diligencia nada varió: Núñez aseguró que Zapata fue el que le mencionó a Tulio, aspecto que Zapata niega. Se abrió una nueva investigación para averiguar cuál de los dos miente.
Ayer también declararon sobre este tema José Sánchez y Miguel Angel Giménez. El primero, dijo que estuvo en la cancha y que como a las 17.45 vio pasar por la calle San Luis un vehículo "medio blanco, manchado". Pero cuando se le recordó lo mencionado durante la instrucción se rectificó: era "Taunus verde".
El jornalero Giménez también estuvo en el partido y vio el Taunus. Inicialmente involucró a Hilario Sepúlveda como ocupante del vehículo, luego se desdijo alegando presiones (ver aparte).

Foto: Zapata y Núñez fueron careados ayer sin que se lograra aclarar qué vieron y qué contaron sobre el partido de fútbol femenino del domingo 9.