Feroz enfrentamiento con menores asaltantes

Saquearon una casa en la toma Espartaco de Neuquén. Cuando llegó la policía escaparon a los tiros. Dos chicos de 14 y 16 años pelearon cuerpo a cuerpo con los uniformados y permitieron la huida de otros tres ladrones.

NEUQUEN (AN)- Una banda integrada por menores de edad armados asaltó una casa y luego se tiroteó con la policía, ayer a la madrugada en la toma Espartaco. En plena persecución dos chicos de 14 y 16 años se trenzaron en una descomunal pelea con los uniformados, al parecer para permitir que los tres ladrones escaparan. Dos suboficiales terminaron en el hospital, los chicos fueron detenidos y luego liberados y se pudo recuperar todo lo que habían sustraído.
El operativo atemorizó a los vecinos de la toma, que pudieron observar cómo una gran cantidad de policías armados se apostaban en las bardas para rodear una humilde casilla que servía de aguantadero de los ladrones.
El episodio comenzó a la 1.30 en la serpenteada calle que bordea el cañadón de la calle Antú, a cuyas márgenes se ubican las viviendas y casillas del asentamiento flanqueado por las bardas. Dos jóvenes armados con un revólver irrumpieron en la vivienda de una vecina y tras reducirla a ella y su esposo inválido bajo amenazas, le robaron un televisor, un centro musical y diez pesos y huyeron corriendo.
"A pesar de que me apuntaban con el revólver a la cabeza pude llamar por el celular a la Policía y cuando se fueron salí tras ellos. Al que me llevaba el centro musical le di un palazo en la espalda y lo dejó tirado", dijo María Carrasco (de 48 años), quien vive con su esposo Manuel González (52), lisiado a raíz de una enfermedad.
Carrasco, en una versión que fue corroborada por otros vecinos, no dudó en atribuirle la autoría del atraco a los jóvenes que desde hace un tiempo utilizan una casilla de madera como "aguantadero", en el extremo norte del cañadón.
En ese lugar se habrían refugiado los asaltantes, que serían varios más de los que irrumpieron en la casa del matrimonio, y desde allí se defendieron a tiros de los policías que trataban de detenerlos. Varios de ellos son menores.
"Fue infernal. Los policías andaban por todos lados, corrían entre las casas y se metían en los patios con patrulleros", relató una mujer. "Escuché muchísimos tiros pero mucho no ví porque me quedé con las nenas", agregó.
La Policía informó que en el operativo fueron detenidos dos menores, de 14 y 16 años, quienes por disposición de la justicia fueron restituidos horas después a sus padres. Al parecer, estos chicos enfrentaron a los efectivos en una maniobra distractiva y para permitir la huida de los ladrones.
En los forcejeos un cabo fue herido en un mano con un arma blanca, mientras que un sargento resultó con traumatismo de cráneo sin pérdida de conocimiento, y fue internado en el Policlínico Neuquén. Se presume que lo atacaron con un piedra o ladrillo.
En la tarde de ayer, según los vecinos, otro menor fue detenido en el "aguantadero". Al parecer pidió auxilio porque presentaba una herida.
"Parece que estaba grave, pero no sabemos quién es ni qué le pasaba", dijo un vecino. El dato no pudo ser corroborado en fuentes policiales.
Tampoco identificaron quiénes serían los autores del asalto a la casa, pero tanto María Carrasco como otra vecina dijeron que se trataba "de los chicos que vienen a esa casilla. Siempre se juntan a beber y a "bolsearse". Hay muchachos y chicas y vienen de todos lados. No es la primera vez que roban, a nosotros una vez nos sacaron todo", dijo un vecino.

Los vecinos viven atemorizados

NEUQUEN(AN)- Para los vecinos de la toma Espartaco, el miedo y la inseguridad son cosa de todos los días.
La mayoría de los pobladores de este asentamiento ubicado en la zona de bardas de Neuquén confiesan haber sido víctimas de algún atraco. Una vecina, por ejemplo, contó a este diario que hace un par de meses varios delincuentes ingresaron durante la noche y le desvalijaron su casa. "Me llevaron desde la ropa hasta el televisor", relató.
Según los vecinos, los malvivientes son menores de edad y actúan bajo la influencia de drogas o alcohol.
Pero con el mismo énfasis aclararon que no viven en la toma: "a pesar de la humildad de este sector -dijo un hombre- acá vive gente honesta y trabajadora. Todos los días se ven caras extrañas, son pibes que se juntan en un aguantadero que está medio escondido, cerca de la barda".
Los vecinos sostienen que los delincuentes vienen desde barrios cercanos como Villa Ceferino y La Estrella. "Es común verlos consumiendo bebidas alcohólicas a cualquier hora, tanto de día como de noche", añadieron.
También recordaron que hasta hace un par de años el lugar era mucho más tranquilo. "No había tantos robos -aseguró el hombre- pero desde que está ese aguantadero allá arriba, el riesgo de que te "afanen" está siempre".
La dueña de la vivienda asaltada dijo que esta no es la primera vez que le roban y admitió que vive atemorizada. "Ya no sabemos qué hacer y es necesario que haya mas seguridad" dijo.

Foto: María Carrasco fue asaltada por la banda. Vive con temor y pide que haya más seguridad en el sector.