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Jueves 10 de mayo de 2001 | |
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Insisten en el "triángulo sin vacunación" |
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Empresarios neuquinos del sector de la carne continuaron ayer con su solicitud para que se flexibilice la barrera sanitaria que impide ingresar reses para faena. Hoy se reunirán con Brillo. |
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| NEUQUEN (AN).- Los empresarios de mataderos, frigoríficos y establecimientos del segmento de intermediación en el comercio de la carne vacuna lograron ayer arrancarle una reunión al jefe de gabinete, José Brillo, para exigirle que el gobierno se ponga al frente de su reclamo e impulse el "triángulo sin vacunación" en la provincia que implica una virtual flexibilización de la barrera sanitaria. El encuentro será hoy a las 11.30 en las antiguas oficinas del Copade y será auspiciado por los diputados de la comisión de producción que se ofrecieron como mediadores para preservar una industria que ocupa en forma directa no menos de 400 puestos de trabajo. Los legisladores habían recibido por la mañana un memorándum de Brillo y el vicejefe de gabinete, Marcelo Dotzel, sobre las gestiones realizadas ante el titular del Senasa, Bernardo Cané. De ese texto sólo trascendió el pedido de Cané de un paréntesis hasta el martes para estudiar la propuesta neuquina basada en preservar la sanidad, mantener el abastecimiento y el precio de la carne y defender las fuentes de trabajo. Brillo les aseguró que no está cerrado modificar las resoluciones. Sin embargo, el desempeño del gobierno neuquino en esta materia volvió a ser vapuleado por los empresarios -con mayor crudeza sobre el gerente de Producción, Guillermo Pellini- aunque también sobre el gobernador Jorge Sobisch. Al primero le achacaron morosidad en responder al Senasa sobre medidas preventivas y su convocatoria a hipermercados para discutir el tema mientras excluía a los pequeños y medianos comerciantes. De Sobisch recordaron las promesas de apoyar económicamente al sector, formuladas en 1994, que "nunca se cumplieron". Los empresarios rescataron la capacidad de gestión del gobierno rionegrino, que logró un estatus ventajoso para el desarrollo de la industria de la carne en esa provincia, al contrario de lo que ocurre en Neuquén y reiteraron sus críticas -ya expresadas en el seno de la Coprosa- al sector ganadero. De la reunión participaron también los concejales de Senillosa. Carlos Cabezas, propietario de Copromaneu, frigorífico instalado en Senillosa, aludió al "valor agregado" de faenar hacienda en Neuquén. Calculó que cada jaula de novillos, valuada en alrededor de 15 mil pesos, reporta entre 3 mil y 3.800 pesos que quedan aquí y ahora se gastan en Río Negro". Los distribuidores locales actualmente adquieren ganado en Buenos Aires, La Pampa o Santa Fe y lo hacen faenar en frigoríficos rionegrinos para luego ingresar la carne deshuesada. Los diputados Aldo Duzdevich, presidente de la comisión y Rita Santarelli y Ricardo Villar, de la Alianza, iniciaron gestiones telefónicas para concertar un encuentro con Brillo, que se obtuvo casi de inmediato. Mientras tanto, fuera de la Legislatura, los empleados y obreros de carnicerías y frigoríficos, hacían una ruidosa guardia. |
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