Miércoles 9 de mayo de 2001
		Se va el arquitecto de rescates del FMI
		Stanley Fischer anunció sorpresivamente su renuncia al organismo internacional
		Washington (EFE).- Stanley Fischer, "número dos" del Fondo Monetario Internacional (FMI), abandona este año la institución multilateral desde la que ha dirigido multimillonarios rescates financieros de economías en crisis, como México, Brasil y Argentina. Fischer, considerado el "arquitecto" de asistencias que superan los 300.000 millones de dólares -entre ellas los rescates de las economías del sudeste asiático-, anunció hoy que dejará de ser el primer subdirector del FMI, tras siete años en el cargo, en cuanto se haya designado a su sucesor. La renuncia de Fischer, anunciada ayer por sorpresa, no permitirá que complete su segundo mandato, que debía terminar en el año 2004. "Creo que es el momento de afrontar otros retos. Ha sido un privilegio trabajar en el Fondo durante estos años trascendentales para el sistema financiero internacional", explicó Fischer, que ha vivido en primera línea las turbulencias de 1997-98 y las crisis de países como México en 1995 o la más reciente de Argentina. Fischer admitió que se sentía especialmente "orgulloso" por el éxito del programa acordado en 1998 para Brasil, por 41.500 millones de dólares, y destacó que, a diferencia de cuando llegó a la institución en 1994, el Fondo actúa ahora con "mucha más transparencia". Nacido en Zambia hace 57 años en el seno de una familia de origen báltico y nacionalizado estadounidense, Stanley Fischer fue el auténtico "cerebro" del FMI, donde está considerado como un buen técnico con un gran dominio de los asuntos que afectan a los 183 países miembros del Fondo Fischer se ha implicado especialmente en América Latina, con cuyos países ha mantenido "una muy buena relación" y para los que ha dirigido las millonarias asistencias financieras coordinadas por el Fondo, desde los más de 50.000 millones de dólares para México en 1995 hasta los 40.000 millones de este año para Argentina. "Mi sucesor deberá hacer frente a las consecuencias de la crisis de Argentina", dijo Fischer en una rueda de prensa en la que se mostró emocionado por abandonar una institución hacia la que tiene "profundos sentimientos". Fischer fue el "número dos" del francés Michel Camdessus y, desde mayo de 2000, del alemán Horst Koehler. El subdirector del FMI negó que haya recibido presiones para marcharse por parte del gobierno estadounidense, contrario a las millonarias operaciones de rescate, y dijo que este le pareció un "momento razonable" para abandonar la institución, algo que, admitió, le ha costado hacer.En el Tesoro "me pidieron que me quedara" pero "pensé que tenía que marcharme en algún momento", dijo Stanley Fischer. El Departamento del Tesoro alabó hoy la "sobresaliente" labor del economista en uno de los puestos más relevantes del FMI, mientras que su todavía jefe, Horst Koehler, la calificaba de "soberbia".
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