Miércoles 2 de mayo de 2001
 

Agremiados no aguantó más y decidió parar el fútbol
 

La convocatoria a conciliación obligatoria no hace presumir que pueda ser una solución
  BUENOS AIRES (Télam).- La temporaria imposibilidad de concretar una conciliación obligatoria porque no hay "responsabilidades compartidas" entre las partes en conflicto ya que la razón es de los jugadores y los clubes no tienen cómo saldar sus deudas, colocó a la situación planteada antenoche con el comienzo de una huelga de futbolistas en un callejón sin salida.
"A esta medida es fácil llegar, pero después va a resultar muy difícil salir", presagió el vicepresidente primero de Boca, Pedro Pompilio, al analizar con los futbolistas del club las consecuencias del paro que se resolvería al día siguiente.
Y después de la huelga por tiempo indeterminado que se determinó el lunes en la sede Agremiados, parece no faltarle razón al dirigente boquense.
Por lo pronto la decisión adoptada precisa que los planteles profesionales del fútbol argentino no podrán prestar servicios en partidos oficiales, pero con obligación de entrenar.
La otra excepción hecha por Agremiados apunta a los equipos que participan de la Libertadores, a los que se les permitirá jugar esta semana y la que viene, cuando los que clasifiquen para octavos de final (Boca y Rosario Central ya lo lograron) disputen sus partidos de ida. Esto ocurriría el 9 de mayo, pero para las revanchas del 17, los jugadores deberían sí hacer extensiva la medida de fuerza al torneo continental. Y además ya los futbolistas ya no concurrirían tampoco a los entrenamientos en sus respectivos clubes.
Todo esto no sería obviamente gratuito para los clubes, ya que según el secretario de la Confederación Sudamericana de Fútbol, Eduardo Deluca, "el club que no se presente en un partido quedará automáticamente eliminado de la competencia e inhabilitado por tres años para seguir participando de ella".
Si esto se produjera, realmente "la sangre habría llegado al río", y es por ello que a partir de hoy las puertas del Ministerio de Trabajo estarán abiertas para que las partes busquen un acuerdo que por estas horas parece difícil de alcanzarse.
Es que si los clubes no podían pagar ayer y tampoco pueden pagar hoy, los jugadores se niegan a jugar por ese motivo, la salida del callejón en la que se encuentra encerrado el conflicto tendría que llegar por otro lado.
El aporte que el presidente de la Comisión de Deportes de la Cámara de Diputados, Daniel Scioli, ofreció el lunes para hacerse cargo del 25 por ciento de la deuda, fue rechazado por los futbolistas.
Hasta el momento ni la televisión ni la AFA se pronunciaron, aunque Julio Grondona indicó que se oponía a la medida de fuerza "porque está comprobado que no resuelve los problemas".
La dinámica de una medida de esta naturaleza obviamente hará que las informaciones se vayan sucediendo y consecuentemente devorándose unas a otras, pero hoy por hoy, por lo que se impone, si no aparece algún mesías salvador, el callejón seguirá sin tener salida para el noveno paro resuelto por los futbolistas en 70 años de profesionalismo.

Marchi asegura que no aflojarán

BUENOS AIRES (DyN) - El secretario general de Futbolistas Argentinos Agremiados (FAA), Sergio Marchi, emplazó a la dirigencia de la AFA a que le acerque "una propuesta convincente" para que sea levantado el paro.
"Llevaremos la medida hasta las últimas consecuencias -enfatizó Marchi-, sin acatar la conciliación obligatoria" que hoy será aplicada por el Ministerio de Trabajo, para el sindicato y los clubes deudores nucleados en la AFA.
El dirigente gremial afirmó que el cese forzado de la actividad en partidos de Primera División, Nacional B y Primera B también tiene por objetivo profundizar "cambios y refundar el fútbol argentino".
Ante una consulta puntual, Marchi dijo que de la medida quedan exceptuadas las categorías C y D, "porque son amateurs -argumentó-, aunque creo que la AFA no programará sus partidos del próximo fin de semana".
Para evitar el paro, la AFA propuso un suerte de "blindaje financiero", dotado de unos 15 millones de pesos, para cubrir parte de las obligaciones incumplidas por los directivos de los clubes.
"Consideramos que esa propuesta es insuficiente. Y llevaremos la medida hasta las últimas consecuencias, sin acatar la conciliación obligatoria, porque nuestro reclamo es legítimo", insistió una y otra vez el líder sindical de los jugadores.
Para Marchi, con este paro "llegó la hora de decir basta. Pretendemos una propuesta convincente. Se acabó la fiesta de los dirigentes que firmaron (documentos) sin intención de pagar".

La deuda de los clubes supera los 38 millones

Juan Carlos Suñé, uno de los abogados de Agremiados, afirmó que "los cálculos parciales del gremio estiman que los clubes adeudan más de 38 millones de pesos a los planteles".
"Por los medios periodísticos trascendió al principio que la deuda orillaba los 100 millones y después, descendió a 63. Pero, de momento, alcanza a poco más de 38, luego del relevamiento en entidades de primera división y algunas del Nacional B", indicó.
Acerca de la conciliación obligatoria, Suñé relativizó las consecuencias de no acatarlo por parte del sindicato "porque los reclamos son legítimos y esto nos lo reconocieron las propias autoridades" de la cartera laboral.
De todos modos, el abogado admitió que "la pérdida de la personería gremial es una posibilidad, pero luego de llevarse a cabo una serie de instancias judiciales que creo que no se darán, ya que antes confiamos en la solución de este conflicto". (DyN).
   
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