El Arranque rescata la esencia del tango
Con "Cabulero", su segundo CD la orquesta El Arranque se afianza en un repertorio tanguero tradicional con un sonido propio. El octeto mañana tacará junto a Wynton Marsalis en Nueva York y luego llevará su música a París.
El Arranque, orquesta integrada por ocho músicos jóvenes, se formó con un objetivo claro: rescatar la esencia de la música ciudadana a partir de un estilo inspirado en la corriente "decareana" y privilegiando desde un sonido propio un repertorio de tangos tradicionales y bailables.
""Cabulero" es el nombre de un tango que compuso Leopoldo Federico y que está incluido en el disco y decidimos titular así el CD porque tanto el tango como su nombre tienen mucha fuerza. Además es un pequeño homenaje secreto a Federico", explicó, Ignacio Varchausky, contrabajista de la agrupación.
En su segunda placa -editada por el sello comunal BAM (Buenos Aires Música) y EPSA Music que incluye un total de 17 temas- El Arranque ha incorporado dos composiciones nuevas: "Jazmín", de Ramiro Gallo, y "Gran Hotel Venos", del guitarrista Alejandro Schwarz.
"Este disco marca la continuación de eso que empezamos a hacer hace cinco años. El lenguaje que tiene el grupo hoy es el que sentimos y que pese a que se enmarca en el sonido de las orquestas del "50, tiene un sonido actual y que por su desarrollo pasa a ser atemporal", precisó Varchausky.
Para el violinista Ramiro Gallo, esta inclinación de El Arranque hacia un tango tradicional, fue una elección casi inconciente. "Nos propusimos tocar tango y el resultado fue lo que nos salía naturalmente y lo que estábamos escuchando en ese momento que más nos representaba", expresó el músico.
En el mismo sentido, Gallo destacó que el tema también pasa por una cuestión de aprendizaje. "Nos gusta tocar tango y para hacerlo bien hay que empezar por el principio, por las bases", y enseguida remató: "Para correr, primero hay que aprender a caminar".
El Arranque está integrado, además, por Camilo Ferrero en bandoneón, Jorge Spessot en segundo bandoneón, Pedro Pablo Pedroso en segundo violín, Ariel Rodríguez en piano y Ariel Ardit en voz.
Luego de haber recorrido con su música las milongas más importantes de la ciudad de Buenos Aires (entre las que se cuentan, El Club Almagro, La Estrella, La Trastienda y Torcuato Tasso) y de varias giras por Europa, El Arranque viaja a la ciudad de Nueva York para presentarse junto al reconocido jazzero norteamericano Wynton Marsalis.
Allí, la banda compartirá dos conciertos los días 3 y 5 de este mes con el prestigioso músico, en los que ambas orquestas estrenarán dos obras originales: la "Suite Borgeana" -tema compuesto por Ramiro Gallo- y una suite que Marsalis creó especialmente para este evento.
Acerca del tema que presentarán en Nueva York, Gallo adelantó que "La suite Borgeana" es muy larga, ya que está compuesta por siete movimientos. Es un tango instrumental y este sí se enrola dentro de lo que podría llamarse "tango moderno"".
Por su parte, el contrabajista habló del orgullo que significa para el grupo tocar junto a Marsalis y sostuvo que "es también una oportunidad para concentranos más en lo nuestro, en lo que queremos transmitir y en remarcar el lugar al que pertenecemos".
Luego, la orquesta viajará a París para participar del Festival "Buenos Aires Tango", que se desarrollará entre el 9 y el 27 y que está organizado en forma conjunta por el Teatro Chaillot (donde se presentarán los días 11, 12 y 13), la secretaría de Cultura porteña y las secretarías de Cultura y Turismo de la Nación.
Al contrario de muchos jóvenes intérpretes de la canción urbana, tanto Gallo como Varchausky, mostraron una postura optimista respecto de las oportunidades que se les presentan a los nuevos músicos de tango y aseguraron que "el tema de la falta de espacio para difundir la música depende de cada uno".
Para los músicos, el tema de la carencia de lugares de expresión tiene un costado ambiguo, por lo que el contrabajista opinó: "No es que no haya ningún lugar ni que es todo fácil. Si bien es cierto que hay pocos lugares para tocar, también depende de uno que esos lugares existan o no".
"Si los sitios existen -se explayó- hay que ir a buscarlos y que se abran para uno y si no hay que inventarlos, que es lo que desde El Arranque venimos haciendo desde hace años".
A la pregunta de si existe un tango para bailar y otro para escuchar, Gallo respondió: "Hay tangos que son más bailables que otros y hay un tipo de tango que prácticamente no es bailable. En nuestro caso el mismo repertorio que nos aplaude en una sala de concierto es el mismo que bailan cientos de milongueros".
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