Adolescentes le salvaron la vida a un hombre de 75

Cayó al río Negro desde el puente que une Viedma con Patagones.Un remero que entrenaba en el lugar lo vio y avisó a sus compañeros. Lo rescataron entre varios jóvenes del club náutico La Ribera.

VIEDMA (AV)- La solidaridad de un grupo de adolescentes salvó la vida de un hombre de 75 años, quien desde ayer vive la milagrosa experiencia de volver a nacer.
Unos 15 jóvenes de la escuela de entrenamiento de canoaje del club náutico La Ribera de Viedma vivieron una experiencia que seguramente no olvidarán.
Como todas las tardes se embarcaron en sus respectivos kayaks y partieron a remar río abajo. A los pocos minutos y cuando ya habían pasado por debajo del puente ferrocarretero Matías sorprendió al grupo. "¡Miren!... un hombre se cayó del puente", dijo con una expresión que evidenciaba no creer lo que había visto en los escasos segundos que el desafortunado hombre medió en recorrer por el vacío los aproximadamente 10 metros hasta caer al caudaloso río.
Todos volvieron la mirada al majestuoso monumento de hierro que había quedado atrás, pero nadie observó movimiento extraño alguno.
Ante la insistencia de Matías fijaron la vista en el agua y alcanzaron a divisar la cabeza del hombre que trataba de llegar a la costa. La destreza del entrenamiento fue puesta a prueba por todos los jóvenes palistas para regresar a prestar ayuda.
Emilio fue el primero en llegar hasta el hombre mayor e intentó subirlo a la embarcación en la que se trasladaba pero no lo pudo lograr.
"Prefirió quedarse tomado del bote porque dijo que le dolían mucho las costillas y que seguramente se había fracturado", recordó el jovencito en diálogo con "Río Negro".

Todo fue muy rápido

Mientras el señor, cuyo apellido sería Fernández, se mantenía a flote otros adolescentes partieron en ayuda al club de donde se envió una embarcación mayor y se avisó al hospital y la subprefectura de Patagones.
Todo fue muy rápido pero alcanzó para que a varios de los adolescentes el impacto de la imagen del hombre en medio del agua les recordara a sus propios abuelos. Y seguramente Fernández vio en ellos a sus nietos.
A los pocos minutos, el hombre era trasladado al hospital Pedro Ecay de Patagones, donde ayer permanecía internado con un par de costillas fracturadas y bajo un hermético cuidado de su familia.
Según se informó desde la subprefectura con asiento en Patagones, Fernández se habría sentido descompuesto y en el medio del puente descendió de su auto con la aparente intención de calmar las náuseas que lo aquejaban. El hombre pudo sufrir un mareo al apoyarse en la baranda del puente desde donde cayó al río.
Afortunadamente a escasos metros de donde se hundió en el agua bajo cero un jovencito miró para atrás, vaya a saber porqué, y vio al hombre que caía. Gracias a él y a los restantes palistas que lo socorrieron, Fernández puede contar la historia.
Dicen que las casualidades no existen pero sí las lecciones de vida. Y ésta es una que tiene el valor de la vida misma la que, muchas veces, nos enfrenta a situaciones difíciles que es preferible pasarlas para seguirlas contando.

Foto_: Los jóvenes remeros actuaron con rapidez para rescatar al hombre de las heladas aguas del río Negro.