Martes 10 de abril de 2001

MAS

 

La sorpresa de Alan García empañó el triunfo de Toledo en Perú

 

El ex presidente va a segunda vuelta al lograr el 26% de los votos. Toledo suma el 36,48%.

  LIMA (Reuters/DPA).- El ex mandatario Alan García se convirtió ayer en la sorpresa de las elecciones de Perú, al ganar el derecho a definir la presidencia en una segunda vuelta con el favorito Alejandro Toledo, según el escrutinio parcial.
La Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) informó que sobre 73,12 por ciento de los votos escrutados, Toledo obtuvo 36,48 % y García 26,11%. La abogada Lourdes Flores, ubicada en segundo lugar en las encuestas previas, mantenía el tercer lugar con 23,69%, agregó.
"La tendencia es que García se separe más de Flores y que ella siga bajando", dijo a Reuters un funcionario electoral.
La propia candidata admitió ayer su derrota. "A todos los peruanos les digo mil gracias", dijo "El pueblo ha emitido su opinión", dijo Flores y agregó que "de todas maneras hemos dejado un mensaje esperanzador al reunir, una mujer, más de dos millones de votos", comentó.
Advirtió que "Perú no soportaría un atisbo de populismo y desorden político". También anunció que postulará a la alcaldía de Lima el año entrante.
Las cifras de la ONPE confirmaron así que Toledo no obtuvo más del 50 % necesario para imponerse en la primera ronda.
Los comicios fueron los segundos en un año en este país andino de 25,7 millones de habitantes, tras la destitución en noviembre del ex presidente Alberto Fujimori. La segunda ronda se realizaría en mayo o junio.
El lunes, los candidatos se reunieron en privado y acordaron reunirse para "buscar puntos de coincidencia".
Toledo y el expresidente peruano dialogaron ayer cuando el primero acudió a la sede de la Alianza Popular Revolucionaria Americana (APRA) de García para "saludarlo con altura" en un "acto democrático" , mientras el expresidente celebraba con sus partidarios su pase a la segunda ronda.
"Siento que tengo una enorme responsabilidad, una preocupante responsabilidad", dijo García. Entre tanto, el gobierno del presidente estadounidense, George W. Bush, felicitó al pueblo peruano por la forma en que se realizaron las elecciones, un proceso que consideró "bien organizado y limpio".
Según los analistas, García, quien estuvo asilado casi nueve años en Colombia, puso en práctica su carisma y excelente oratoria para arrebatarle los votos a Flores y saltar del tercer al segundo puesto en las preferencias de los electores. Pero ahora, en la segunda ronda, las cosas vuelven a cero. "Los naipes se reparten otra vez y empieza un nuevo partido", dijo el analista Augusto Alvarez Rodrich.
García gobernó Perú entre 1985 y 1990 y su gestión, luego de dos años de bonanza, estuvo marcada por una hiperinflación de más de 7.500 por ciento y acusaciones de corrupción.
El gobernante que asuma el poder el 28 de julio para cumplir un mandato hasta el año 2006 deberá hacer frente a una fuerte recesión, un alto índice de desempleo y la pobreza que afecta a más de la mitad de la población.
Mientras Toledo tiene ideas de libre mercado y un discurso populista, García, un socialdemócrata, es partidario de que el Estado supervise la regulación de los servicios públicos.

Mercados negativos

Tras difundirse los resultados, los mercados reaccionaron negativos en torno a la presencia de García en la segunda ronda, a la vez que se confirmaba que el próximo gobernante tendrá que liderar con un Congreso disperso.
En Lima la moneda local cerró la jornada con importantes pérdidas y la bolsa de Lima cayó 2,43%. "La reacción no se ha hecho esperar en Wall Street para los Bradys y por ello el riesgo país creció en 50 puntos básicos", dijo Carlos Janada, vicepresidente para América Latina del Morgan Stanley.
Los mercados esperaban una victoria de Toledo en primera vuelta o que éste pasara a una segunda ronda con Flores.

Buscan "coincidencias"

Lima (EFE).- El candidato ganador de la primera vuelta de las elecciones de Perú, Alejandro Toledo, y su futuro rival en la segunda vuelta Alan García, dialogaron tras los comicios y acordaron reunirse para "buscar puntos de coincidencia".
Toledo y el ex presidente peruano conversaron hoy cuando el primero acudió a la sede central de la centroizquierda Alianza Popular Revolucionaria Americana (APRA), partido de García, para, dijo, "saludarle con altura" en un "acto democrático".
El economista líder del partido Perú Posible dijo al ex gobernante "he querido venir a interrumpir tu encuentro con tu pueblo, que es el mio, dicho sea de paso", mientras García celebraba son sus partidarios los recuentos favorables a su candidatura.
García dijo a la prensa que "he tenido la inmensa satisfacción de recibir la visita de Alejandro Toledo, candidato que ha obtenido el primer lugar en este primer turno y que ha venido muy democrática y cívicamente a expresar su saludo". El ex presidente consideró que la visita de su oponente era "un paso fundamental que nos acerca y que nos obliga a concertar y a buscar puntos de coincidencia". Informó de que ambos se habían puesto de acuerdo para "seguir conversando durante estos días". Añadió que esperaba que los peruanos vean "en nuestra conversación y en nuestro acuerdo no una negociación politiquera sino el deseo de mostrar al país que nosotros tenemos cosas en común y que si tenemos diferencias podremos discutirlas. (EFE)
Un complejo panorama se abre para la segunda vuelta electoral

Con la derecha aparentemente fuera de carrera y la ultraderecha convertida en remota minoría, los peruanos quedaron en camino de definir su próximo presidente entre Alejandro Toledo y Alan García, dos líderes que a su modo dicen apostar por la "tercera vía".
Las razones por las que Toledo estuvo lejos del 50% que le hubiese dado ese triunfo en primera vuelta, y que pronosticó tantas veces con inocultada soberbia, y las que llevaron al electorado en confiar de nuevo a García, un cadáver político apenas unos meses atrás, eran ayer el centro de los comentarios de los especialistas.
El líder de Perú Posible, en campaña desde hace año y medio, cuando quiso derrotar en las urnas al régimen fujimorista, parece tener muchas dificultades para superar su techo. Sus contradicciones, su falta de claridad programática y las dudas que genera como persona parecen estar confabulándose contra él, a pesar de haber consolidado de otra parte un importante apoyo popular.
Lo de García, entretanto, se explicaba en su carisma, su facilidad para comunicarse con las masas, en la persecución que sufrió de parte del pasado régimen y en su agenda ideológica, en la que se colocó como el más radical contradictor del neoliberalismo y abanderado de la "justicia social", a lo que sumó una actitud conciliadora y tolerante.
Toledo llega a la segunda vuelta con todas las de ganar. Tendrá unos 10 puntos porcentuales de ventaja y, sobre todo, tendrá al frente a un rival con demasiados anticuerpos. Pero eso es sólo teoría, sobre todo cuando ese rival es García, a quien los expertos en opinión no dudan en calificar como uno de los mejores candidatos que pueda haber en el mundo desde el punto de vista mercadotécnico.
Según se especulaba , el ex presidente buscará correr a Toledo hacia la derecha para quitarle su bandera de "no al continuismo". De hecho, el postulante por Perú Posible se verá disminuido al no tener el fantasma del fujimorismo, que alentó contra Flores, y tendrá que demostrar que sus ofertas tienen contenido real y que sabe manejarlas, pues ha dejado muchas dudas en tal sentido. El hábil García tratará que la agenda de campaña se centre en el futuro, para eludir que le saquen en cara sus múltiples errores del período 1985/90, y presumiblemente forzará a Toledo a aceptar un debate en el que tiene todas las de ganar.
Será una segunda vuelta entre dos candidatos con arraigo popular, con bases preferenciales en las clases bajas y en provincia, con deseos renovadores y sin rubores para caer en la demagogia. Desde ese punto de vista, será una lucha mucho más compleja a la esquematizada que se preveía en caso de una definición Toledo-Flores. (DPA)

Escenario: Pesadilla para unos, "salvavidas" para otros

Mientras Juana Gutiérrez compraba ayer en un mercado limeño refunfuñando el estribillo de que "la profecía se cumplirá" tras las elecciones, la vendedora le decía que Alan García será el presidente "salvavidas" de Perú.
"Alan Damian" es como llaman a García - quien pasó a una segunda ronda electoral por la presidencia- en los programas cómicos en alusión al desastre económico y social con que dejó a este país tras su gobierno (1985-1990).
Los peruanos están polarizados en torno a García .
Muchos tienen expectativas en que podría ser el próximo presidente. "Es nuestro salvavidas, él piensa en el pueblo, lo que hizo mal fue por su juventud e inexperiencia. Además más vale malo conocido que bueno por conocer", dijo la vendedora de verduras Luisa Taipe. "La profecía se cumplirá, nos regresará al infierno", acotó Gutiérrez, molesta porque también cree que García puede ganarle a Toledo.
García, un abogado de 51 años de cautivante oratoria, quien regresó en enero de un exilio de nueve años tras levantarse los cargos de corrupción en su gobierno, sorprendió en las elecciones y se aseguró un segundo lugar y el derecho a definir la presidencia con Toledo.
Atrás quedaron los recuerdos de las enormes filas para comprar un poco de arroz o leche, la hiperinflación de 7.500% anual y los apagones cada Navidad por ataques rebeldes durante el gobierno de García, quien con 35 años asumió como el presidente más joven de Perú. "Los fujimoristas preferirán votar por García porque odian a Toledo", dijo con temor Benito Jiménez, contador de 46 años.
"Voy a cerrar mis cuentas bancarias, no vale la pena tener nada sobre lo que García podría poner sus manos", dijo Isabel, una mujer de 50 años "Es un encantador de serpientes, capaz de vender piedras", dijo el taxista Marcial Chumo.
Para el psicólogo Jorge Bruce, el ex mandatario tuvo una campaña "bastante sintonizada con la banda popular", pues con sus propuestas concretas como crear el banco agrario o bajar las tarifas de los servicios públicos encandiló a las masas, amén de que es una "persona seductora y de discurso sencillo". "Cuando lo veo por televisión cambio de canal porque sino voto por él", agregó Bruce. (Reuters)

   
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