Domingo 29 de abril de 2001

 

Pidió un pollo, fue a la caja y robó 1.000 pesos

 

Un joven entró a Pollolín de Roca simulando ser comprador, pero a la hora de pagar sacó un revólver y exigió la recaudación. Antes de huir, se llevó también la cartera de la cajera.

  ROCA (AR).- Después de comprar un pollo y dirigirse hacia la caja, un joven robó alrededor de 1.000 pesos de un comercio roquense en la noche del viernes.
El hecho ocurrió alrededor de las 19.45 en el local de Pollolín, ubicado en Tucumán 1.476, cuando un sujeto amenazó con un revólver a una cajera del comercio, sacó toda recaudación y huyó también con la cartera de la mujer.
A pesar de que al momento de desnudar sus intenciones se lo notó un tanto nervioso, nada había sospechar del robo cuando el delincuente entró al local. Luego se comprendió que todo se trataba de una simulación para no generar temor entre los vendedores.
"Me pidió un pollo de buena manera como lo hacen todos los clientes. No me acuerdo bien de la cara porque nunca pensé que después iba a asaltarnos", comentó ayer el encargado del comercio.
Según el relato de las víctimas, cuando llegó a la caja para pagar, el delincuente sacó un revólver con su mano derecha y obligó a la cajera a que le entregara todo el dinero.
En ese momento cubrió parte de su rostro con el pulóver que llevaba puesto y estuvo muy atento para que desde el sector externo al comercio nadie advirtiera sus movimientos.
Al momento del asalto, dentro de Pollolín había cuatro personas: el vendedor, la cajera y dos clientes, uno de los cuales estaba cerca del lugar de pago y fue obligado por el malviviente a no mirarlo a la cara.
"Todo pasó en menos de un minuto. Cuando quise acordar tenía un revólver apuntándome y el chico pidiéndome la plata y que me tire al piso", comentó la cajera.

Se lo notaba nervioso

Según comentaron las víctimas, el ladrón era joven y se lo notaba nervioso, "aparentemente por su inexperiencia".
Una vez que se alzó con el dinero que había en la caja y la cartera de la mujer, se retiró corriendo del local y emprendió una veloz fuga hacia la calle San Juan.
En ese momento, el vendedor salió y avisó a la policía a través del sistema de alarma de un comercio vecino. Sin embargo, cuando llegaron los uniformados y montaron el operativo de búsqueda era demasiado tarde porque el sujeto desapareció de la zona en pocos segundos.
Según se informó, el monto de la recaudación guardado en la caja era excepcional, ya que "justo nos pagaron varios clientes con billetes grandes y eso nos obligó a sacar cambio de otro lado y guardar lo recibido en la caja, que nunca tiene esa cantidad de plata", señaló el vendedor del local.
Si bien el robo del viernes fue el primero que sufre Pollolín desde que abrió, el hecho generó preocupación entre los comerciantes de la zona, que desde hace unos meses soporta constantemente los embates de sujetos dedicados a cometer delitos.
A raiz del nuevo episodio, algunos plantearon la posibilidad de contratar un servicio de seguridad privada para el sector, aunque otros se mostraron desconfiados a que esa sea la solución a sus problemas de inseguridad. Por lo pronto, desde ayer el local de Pollolín había cambiado la ubicación de la caja para no vivir nuevos momentos de tensión como los del viernes.
   
    ® Copyright Río Negro Online - All rights reserved    
     
Tapa || Economía | Políticas | Regionales | Sociedad | Deportes | Cultura || Todos los títulos | Breves ||
Ediciones anteriores | Editorial | Artículos | Cartas de lectores || El tiempo | Clasificados | Turismo | Mapa del sitio
Escríbanos || Patagonia Jurásica | Cocina | Guía del ocio | Informática | El Económico | Educación