Miércoles 18 de abril de 2001

 

Lo volvieron a juzgar y le dieron la misma pena

 

Un sujeto que asaltó a un taxista fue condenado. Deberá estar cinco años en prisión, en Bariloche.

  SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- En el nuevo juicio dispuesto por el Superior Tribunal de Justicia los jueces subrogantes de la Cámara Primera del crimen le impusieron una idéntica pena -cinco años de prisión- a un delincuente que asaltó a un taxista y lo hirió de varias puñaladas después de robarle la billetera con el producto de la recaudación.
La sentencia anterior resultó anulada por el STJ porque en principio fue suscripta en forma errónea por un magistrado que no había participado del debate ni en la deliberación posterior. Si bien el error fue enmendado ya se habían vencido los plazos legales para dictar sentencia y el juicio tuvo que realizarse nuevamente.
El condenado es Mario Segundo Maldonado, un joven de 19 años que en la madrugada del 19 de marzo del 2000, después de asistir a una fiesta que se desarrollaba en el gimnasio Don Bosco, le pidió al taxista Celedonio López que lo trasladara hasta la localidad de Dina Huapi, ubicada a unos 15 kilómetros de Bariloche. Lo acompañó en el trayecto Ignacio Chodilef, pero descendió antes que Maldonado, en Los Nogales y Tulipanes, y no tuvo participación en el hecho delictivo. El imputado completó el viaje en el taxi y cuando el chofer detuvo la marcha lo atacó con un cuchillo y le pidió la billetera con los 70 pesos que había recaudado. López le entregó el dinero, pero Maldonado igual le produjo lesiones graves con el cuchillo, en el rostro, el cuello y la mano derecha.
Maldonado sostuvo que en compañía de Chodilef tomaron un taxi a Dina Huapi y "estaba bastante en pedo"; que al llegar le abonó 7 pesos pero el taxista no estaba conforme, discutieron y se agarraron a las piñas, y López le pegó a él primero. Aseguró que él no tenia armas y que creía que el taxista tenía un cuchillo.
Celedonio López declaró que el importe del viaje eran l0 pesos y el pasajero lo agredió empleando un arma blanca, supone que un cortaplumas, ocasionándole dos cortes en el cuello y uno en la mano. Dijo que luego de inferirle la primera herida, el asaltante le solicitó la entrega de la recaudación. Después sintió que había recibido un nuevo corte en la zona del cuello y se bajó del auto, viendo cómo el delincuente escapaba.
El fiscal Carlos López dijo que "los elementos reunidos resultan aptos e idóneos para arribar a un juicio de certeza". Encontró "el testimonio de López categórico y contundente, y a ello se suma el secuestro de un cortaplumas y un vaquero del imputado con manchas de sangre". Entendió que el ataque había sido artero y solicitó la pena de cinco años de prisión, que es el mínimo previsto para el robo con armas.
El defensor Marcelo Alvarez Melinger pidió la absolución de Maldonado por el principio de la duda y reprochó que se hubiera utilizado como evidencia la prenda manchada con sangre "cuando no se comprobó que le perteneciera a la víctima habiendo medios en la ciudad para establecerlo".
En esta oportunidad el primer voto estuvo a cargo del juez Alejandro Ramos Mejía, que no atendió a los argumentos expuestos por el imputado en la indagatoria y tampoco a los planteos del defensor oficial. Consideró adecuado el pedido de pena propuesto por el fiscal López y a su voto adhirieron los jueces Ariel Asuad y Miguel Angel Lara.
   
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