Creen que el repartidor fue víctima de una banda

La policía considera que al menos tres delincuentes lo abordaron. Los rastrillajes fueron intensos ayer, pero los resultados negativos. Su esposa viajó a Lamarque para participar de la búsqueda del joven.

Con mucha preocupación, aunque sin perder la calma, los padres de Fabián Muñoz esperaron ayer por novedades en el domicilio de su hijo, ubicado en el barrio Andrade de Roca.
Reinaldo Muñoz e Irma Mansilla observaban a cada momento a sus cuatro nietos, que con dos, ocho, doce y catorce años se daban cuenta que las cosas en su casa no eran como cualquier otro día.
"No entendemos nada, él es una persona muy tranquila, que no se mete con nadie y por eso nos cuesta creer que le pueda haber pasado algo", señalaron ayer al mediodía.
Al igual que los investigadores policiales, se inclinaron por creer que Fabián fue víctima de un delito. "En los últimos días no tuvo ningún problema con la mujer ni en el trabajo", agregaron.
Por su parte, en la panadería donde trabajaba ayer se vivió un clima muy tenso. Al margen de esto, los compañeros y dueños del local no dudaron en afirmar que el joven mantenía una excelente relación con todo el mundo, algo que también se expresó desde la policía y echaría por tierra las hipótesis que ubican a la ausencia como una decisión personal.
Muñoz dejó a su mujer en una reunión religiosa, a la que él también debía concurrir, pero no pudo porque las tareas en la panadería se retrasaron. Ayudó a hacer pan a un compañero y antes de irse a descansar, decidió llevarlo a la casa de éste, en el barrio Noroeste y cerca de la alcaidía. "Era algo que nunca hacía", comentaron sus padres.
La policía asegura que la camioneta salió hacia la zona de chacras de Roca no después de las 22 . Fue hallada a las 2.30 en Lamarque y sin combustible, a pesar de que a 200 metros había una estación de servicio. (AR)

"Sólo pensaba en su familia"

LAMARQUE (AVM).- "Mi esposo sólo pensaba en su familia. Trabajaba para mí y para sus hijos". De esta manera y en medio de un profundo dolor, Viviana Benavídez se expresó ayer en Lamarque, a donde llegó con un familiar para buscar a Fabián Mu-ñoz.
"Tiene la necesidad de buscarlo ella", habían di-cho sus suegros momentos antes.
Benavídez hablaba con evidente estado de conmoción. Relató que el viernes su esposo quedó en pasarla a buscar por una reunión cuando terminara con sus tareas en la panadería, pero nunca apareció. "Yo salí de la reunión y como no esta-ba me fui a mi casa. Cuan-do pasé por la panadería me llamó la atención que la camioneta no estaba", agregó.
Llegó a su casa y esperó un rato, hasta que llamó a los propietarios de la panadería. "No sé, tuve un mal presentimiento, así que después llamé a la policía", dijo.
Benavídez negó que haya habido conflictos familiares. "Mi esposo nunca se alejó de la familia y me-nos por sus hijos. Si usted pregunta le van a decir que él hacía todo por sus hijos y por mí".
Cuando el sol caía ayer, volvió a Roca para reencontrarse con sus pequeños hijos, que esperan igual que ella para volver a ver a Muñoz.