Lunes 23 de abril de 2001 | ||
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San Lorenzo provocó un"Cordobazo" |
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El 3-0 ante Talleres decoró una gran actuación que le valió ser puntero. |
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CORDOBA (DyN) - Con un segundo tiempo sobresaliente, San Lorenzo prácticamente borró de la cancha a Talleres, lo goleó 3-0 y quedó claro que cada vez se tiene más fe en la pelea por el título doméstico, ahora compartiendo el liderazgo con Ríver. El infalible Romeo consiguió los dos primeros goles y el tercero lo consiguió Serrizuela con uno de sus temibles remates desde fuera del área grande. Lo único negativo para San Lorenzo en esta jornada fue la lesión que sufrió el polifuncional Guillermo Rivarola, con un esguince de rodilla. El primer tiempo fue mediocre, con predominio de Talleres al principio y con mejoría posterior de San Lorenzo. Hasta los 20 minutos Talleres fue superior, con orden en el medio campo y una distribución correcta del balón a partir de Alaniz y Pino. En Talleres buscaron con frecuencia a Cuba, el delantero que en sus primeros partidos como titular ya mostró su eficacia en los últimos metros. De a poco comenzaron a aparecer los armadores de San Lorenzo, Romagnoli y Rodríguez y así se emparejó el juego. Como es habitual, Estévez también contribuyó al abrir el frente de ataque. Otro rendimiento importante en el conjunto visitante fue el de Tuzzio como volante por derecha, recuperando la pelota y cuando vio la ocasión se sumó al ataque, como en la acción que terminó en el primer gol de Romeo. Fue Tuzzio quien se llevó el balón, metió una diagonal y aplicó el pase justo, del que se valió el máximo artillero del campeonato. Ese tanto de Romeo alimentó la fe de los siete mil simpatizantes que acompañaron a San Lorenzo hasta Córdoba. En el segundo tiempo San Lorenzo salió a consolidar la victoria con máxima decisión. Romeo acertó, a los 3 minutos, al cabecear entre varios interesados, todo tras centro de Rodríguez, quien recibió un rechazo de la defensa de Talleres. San Lorenzo se convirtió entonces en infinitamente superior, porque los cinco jugadores fundamentales de la primera parte aumentaron su volumen de juego. Romagnoli y Serrizuela se juntaron para un tiro libre, el armador tocó cortó y su compañero le pegó a la pelota con la potencia acostumbrada, por lo que el gol se produjo a la derecha de Cuenca. En un cuarto de hora San Lorenzo se aseguró el éxito y todavía mereció más, inclusive cuando se dedicó a contraatacar. San Lorenzo se llevó para Buenos Aires toda la esperanza y le dejó a Talleres toda la decepción y todos los reproches para J.J. Lopez. Y eso que no es cordobés A Bernardo Romeo, jugar en Córdoba le sienta muy bien. |
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