Duras críticas a la policía chilena

El plantel "Santo" también acusó al golero de Concepción

Michelini asegura que no agredieron

BUENOS AIRES (DyN) - El mediocampista Pablo Michelini enfatizó ayer que ningún futbolista de San Lorenzo agredió con una botella y le provocó una gravísima lesión en el pómulo derecho al jugador de Deportes Concepción Víctor Cancino, quien fue sometido a una intervención quirúrgica de más de cinco horas de duración.
Informaciones procedentes de Chile dieron cuenta de que el volante Cancino sufrió una triple fractura en el pómulo derecho durante los incidentes que se desarrollaron tras la victoria de Concepción sobre San Lorenzo.
Inclusive, desde la ciudad de Concepción, dirigentes y familiares del jugador lesionado argumentaron que en las imágenes de la televisión local se advertía que uno de los argentinos fue el agresor valiéndose de un botellazo.
Ya en Buenos Aires, Michelini subrayó que "no fue ni Pusineri ni ni Ameli ni yo. Ningún jugador de fútbol de San Lorenzo fue".
En cambio, el volante evitó desligar a otros integrantes de la delegación argentina del ataque sufrido por Cancino.
"Hay gente que por tiene campera parecida, hay personal de seguridad, hay colaboradores, pero en las imágenes van a comprobar que el agresor no fue ningún jugador de San Lorenzo", insistió Michelini.

Navarro Montoya responsabilizó a los árbitros

El arquero Carlos Navarro Montoya culpó ayer al árbitro boliviano Herbert Aguilera por los incidentes que se vivieron antenoche en el partido entre Deportes Concepción de Chile y San Lorenzo, por la Copa Libertadores.
Navarro Montoya, que ataja para Concepción, también recordó los incidentes que vivió en Chile jugando para Boca Juniors, en el "91, pero aseguró que "aquello fue mucho más grave".
"El árbitro dirigió muy mal, para los dos equipos, y en algún momento la cosa se puso dura por responsabilidad de él, que fue muy permisivo con algunas faltas", expresó el golero.
Al finalizar el partido que San Lorenzo perdió por 3 a 2, los jugadores del equipo de Boedo increparon al árbitro, discutieron con sus colegas de Concepción y en el escándalo intervinieron los carabineros, lo que originó una gran confusión.
"Había mucha tensión en el partido, los dos nos jugábamos mucho y ellos no esperaban ese resultado y por eso se alteraron un poco. Por suerte muchos estábamos con la cabeza fría y pudimos separar y tranquilizar las cosas", comentó el arquero en declaraciones radiales.
Respecto al partido del "91, cuando Boca jugó con el Colo Colo por las semifinales de la Libertadores y el partido finalizó con una batalla campal entre los jugadores y los carabineros, Navarro Montoya afirmó que lo de anoche "no fue tan grave".
"Lo que pasó ahora es muy distinto, no fue algo tan grave porque sé que el plantel de San Lorenzo viajó sin problemas en un vuelo chárter asi que la historia quedó ahí", señaló.
En tanto, el comisario deportivo del partido, el paraguayo Arnaldo González, consideró como "normal" los incidentes desatados al final del encuentros.
"No pasó nada. Son incidentes de Copa, los jugadores reaccionaron mal, pero ya todo pasó", dijo González antes de afirmar que no presentará ningún informe por los incidentes.
La policía chilena, por su parte, aclaró que "en ningún momento" quiso detener a los jugadores sino detener al pelea mientras que el saldo para el equipo argentino fue un profundo corte en la boca de Pablo Michelini, a raíz de un golpe.

Cancino sufrió tres fracturas en el pómulo

SANTIAGO, Chile (ANSA).- El jugador de Concepción Víctor Cancino será intervenido quirúrgicamente al sufrir tres fracturas en su pómulo derecho en la gresca posterior al partido con los integrantes del plantel de San Lorenzo.
Ambos conjuntos se midieron por el Grupo 3 de la Copa Libertadores en Concepción, a 500 kilómetros al sur de Santiago y si bien el triunfo 3-2 de los locales fue merecido, la reacción de los argentinos, especialmente contra el árbitro boliviano Herbet Aguilera, es considerada por la prensa chilena como desmedida.
La prensa critica especialmente al atacante uruguayo Sebastián Abreu, quien lanzó numerosos golpes. Durante la gresca, Cancino fue agredido por Abreu, posiblemente con una botella, sufriendo las fractura en su pómulo y ahora se encuentra internado en el hospital del Instituto de Seguridad del Trabajo donde será intervenido quirúrgicamente.
Los dirigentes de Concepción añadieron que Cancino estará fuera de las canchas por lo menos por dos meses y solicitarán la intervención del fútbol nacional para que ayude a su rehabilitación.
En tanto, por arreglos directos entre dirigentes de Concepción y de San Lorenzo con la policía, el equipo argentino pudo abandonar en la misma noche del martes la ciudad en un vuelo chárter directo a Buenos Aires.