Un campesino cuida a punta de pistola los fósiles que halló

El "cementerio de animales" está en Comallo. Ningún científico fue al lugar a pesar de la denuncia.

COMALLO (Especial).- El sol rajaba la tierra y el viento patagónico levantaba los coirones. El paraje era desolador, casi desértico. Junto a un médano de areniscas don Jazmín Drebnieks se inclinó y comenzó a destapar un completo maxilar fosilizado. Una veintena de dientes, de hasta 13 centímetros de largo por 3 de ancho, emergieron hacia el cielo. "Ven, este es uno de los tesoros", explicó Drebnieks ante "Río Negro".
Previamente el poblador rural exhibió ante el cronista varios huesos petrificados, restos de fósiles marinos, madera petrificada y un par de garras de un ave que habría habitado la tierra hace miles de años.
También guarda estalactitas de piedra volcánica, cristales de cuarzo y puntas de flechas.
"Los fui encontrando de a poco, mientras caminaba por el campo", explicó.
Drebnieks y su familia viven en la localidad rionegrina de Comallo, distante 120 kilómetros de Bariloche, por la ruta provincial 23. Hace 6 años compró un campo de 1.175 hectáreas, distante unos 18 kilómetros del pueblo.
El predio perteneció a unos parientes de su esposa, Miguela del Pilar Namur, que se cansaron de la crisis agrícolo-ganadera y emigraron hacia la ciudad.
El nuevo dueño y su familia desafiaron al destino e intentan vivir en el campo.
Alambraron, mejoraron una casita rural y comenzaron a trabajar en la agricultura.
Para ello debieron construir varios kilómetros de canales para el riego. Así, hace poco más de un año, encontraron el primer fósil.
El hallazgo entusiasmó a Drebsnieks quien recorrió en forma incansable el campo y logró encontrar indicios de que en ciertos lugares podría haber un pequeño "cementerio" de animales.
Comenzó a leer algunos libros de palentología y a la vez inició los trámites para que la provincia envíe a un palentólogo el cual verifique lo encontrado.

Por temor a los robos

La noticia recorrió el pueblo y al tiempo aparecieron los primeros curiosos que intentaron llevarse algunos huesos y restos fosilizados.
"Hoy vivo intranquilo y debo cuidar los fósiles a punta de pistola", reconoció el poblador. En una de sus ausencias ya constató un robo. "Cavaron y se llevaron una mandíbula completa, parecida a la que les mostré", indicó.
Sintiendose desprotegido y abandonado a su suerte decidió recurrir a la prensa y se conectó con LRA 30, Radio Nacional de Bariloche. Su director, Pastor Méndez, junto a "Río Negro", viajaron al lugar.
Drebnieks relató que aguarda impacientemente que las autoridades le envíen un científico y que asimismo lo nombren depositario de los fósiles.
"Hasta ahora sólo vienen algunos curiosos y otros que quieren llevarse los fósiles. Hace un mes llegó incluso un señor muy respetuoso, que me ofreció mucho dinero para poder extraer un animal completo y llevárselo. Me aconsejó que no pierda tiempo con el gobierno. Pero yo no quise saber nada", explicó el gringo gaucho.

"Sueño con instalar un predio para visitantes"

COMALLO (especial).- Jazmín Drebnieks sabe muy poco de fósiles y huesos petrificados. No obstante, está convencido que nadie se llevará el tesoro que encontró en su campo.
"Yo sueño con poder instalar un predio para que los visitantes puedan ver los animales prehistóricos", afirma. Para ello proyecta un complejo turístico, con un gran museo. Cree que los animales podrían ser exhibidos en el mismo lugar en donde están ahorra, desenterrados, cercados y techados.
"En Bariloche hay muchos turistas extranjeros y pienso que algunos tendrían interés en visitar un lugar con restos arqueológicos", explicó. Mientras espera emplazó una importante huerta y también planta ajo y frutales. "Aquí crece todo lo que sembrás. Solo hace falta agua", sostiene. También fabrica ladrillos y ladrillones, los cuales asegura son muy buenos y no se rompen. Comenzó a forestar y cuenta con una tropilla de 20 caballos, "para que los visitantes no tengan que caminar tanto por el campo". En las tareas del campo lo ayuda su esposa y sus tres hijos: Lilia del Pilar (16 años), Magni Nidia (15) y Lain Keith (9).

Foto:Don Jazmín Drebnieks es el dueño de las tierras donde halló los huesos. Asegura que se los quieren robar y que le ofrecieron plata por ellos. La provincia aún no se interesó en el tema.