Viernes 9 de marzo de 2001

 

Destruyen araucarias para construir hidroeléctrica

 

Lo hizo una empresa al servicio del EPEN, cerca de Pino Hachado. ATE denunció el atentado y responsabilizó a Ricardo Corradi. La especie es símbolo provincial y una de las plantas protegidas.

  NEUQUEN (AN).- Una empresa que está al servicio del EPEN cortó las raíces de una añosa araucaria, mochó el tronco de otra y arrancó la corteza de una tercera sólo para que un camión baje tuberías hasta el arroyo donde construirá una microcentral hidroeléctrica.
El caso fue denunciado ayer por la Asociación de Trabajadores Estatales (ATE) que acusó directamente al presidente del EPEN y ex vicegobernador de la provincia, Ricardo Corradi, con quien el sindicato mantiene una tensa relación.
ATE difundió ayer un documento con la denuncia del caso y presentó fotografías en la que muestra el estado en que quedaron las araucarias.
El escenario del descalabro se encuentra a unos diez kilómetros del paso internacional Pino Hachado, que comunica a esta provincia con Chile.
La central hidroeléctrica, cuya construcción comenzó hace unos 15 días, alimentará de energía la zona del paso internacional.
La obra tiene que ver el objetivo de dinamizar el tránsito entre ambos países y fortalecer los vínculos comerciales.
En un comunicado de prensa de ATE, firmado por el secretario de Finanzas de ATE Raúl Dobrusín y la secretaria gremial Alejandra Barragán, el gremio estatal acusó a las autoridades del EPEN de "destrucción del medio ambiente".
Es que según el gremio no era necesario dañar las araucarias -una de las cuales tiene por lo menos 200 años- para realizar la obra. Los trabajos están siendo ejecutados por el ingeniero Jorge García, quien está a cargo de una empresa que presupuestó 200.000 pesos para hacer la microcentral de Pino Hachado. La obra está en el ojo de la tormenta porque según el gremio pudo llevarse a cabo con personal del EPEN y porque no habría sido debidamente licitada.
En diálogo con "Río Negro" Dobrusín comentó que uno de las araucarias -la que perdió sus raíces- tiene unos veinte metros de alto, mientras que las dos restantes están entre los 10 y los 12 metros.
La araucaria, también conocida como pehuén, es la especie símbolo de la provincia (está incluso en la bandera) y se halla dentro de la categoría de las plantas protegidas. En Pino Hachado, a uno y otro lado del límite internacional, los árboles son el sello distintivo de la región.
"Por las graves consecuencias que esto tiene para el medio ambiente de la zona, ya que las araucarias necesitan cientos de años para lograr su pleno desarrollo, es que hacemos responsables a las autoridades máximas del EPEN por el grave daño producido", expresó la denunciada difundida por ATE.
Las araucarias mutiladas estaban dentro de la denominada Cuenca del Aichol, a muy pocos metros del arroyo Mallín de Mendoza. En el curso de agua, precisamente, está prevista la instalación de la microcentral. Los trabajos de la empresa comenzaron hace unos quince días y según la denuncia del gremio, la avanzada contra las araucarias la hizo una topadora.
Hace un mes, el ambientalista Jorge Carro denunció que para la construcción de una cabañas, los albañiles rebanaron las raíces de una araucaria que se erige a pocos metros de un departamento forestal. La tala de esta especie, caracterizada por su lentísimo crecimiento, está prohibida desde hace mucho años. Tampoco se pueden recoger los piñones, el fruto de las araucarias, para cuya recolección se suelen cometer muchas barbaridades.

   
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