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Martes 27 de marzo de 2001 | |
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Dura situación en el hospital de Allen |
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Su director, Javier Van Opstal, amenazó con renunciar si no oyen sus reclamos |
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| ALLEN (AA).- "Esta es la última vez, por mi parte, que hago los reclamos al Ministerio de Salud. Porque realmente si voy a ser un obstáculo para el funcionamiento hospitalario pienso presentar la renuncia", aseguró ayer molesto el director del hospital de Allen, Javier Van Opstal. La difícil situación que viene atravesando el nosocomio en el último tiempo, y la "falta de respuestas concretas" obtenidas desde la cartera de Salud provincial, según advirtió el titular del "Ernesto Accame", torna cada vez más crítico el panorama para la operatividad del centro hospitalario de esta ciudad. La importante carencia que existe en materia de equipamientos, junto a la falta de un presupuesto acorde a las necesidades que allí se atiende en forma diaria, son los principales factores que inciden en la problemática de salud local. "Si ésto no se cumple, voy a renunciar, porque "dibujado" no voy a estar. Observo que soy el que más reclamos hago en la provincia, hace más de siete meses ya que estoy, y hasta ahora no tenemos mayores respuestas", graficó además. De este modo advirtió que se alejará del cargo, si bien su designación fue apoyada por un vasto sector de la comunidad tras la intervención del nosocomio, si en su gestión no se logran los beneficios esperados. El presupuesto destinado al hospital allense no ha variado desde hace años, pese a que las demandas han crecido en forma sostenida en casi un cincuenta por ciento, según se informó anteriormente. El área de asistencia que desde aquí se cubre, junto a las cinco salas periféricas que se extienden entre los barrios más alejados y la zona rural, supera los 30 mil habitantes. Incluso ésta se ha visto incrementada últimamente debido a la gran cantidad de gente que se encuentra sin empleo, o con problemas con las obras sociales, según se destacó. "Nuevamente se pidió una serie de equipos en el área de laboratorio y también para el sector de rayos. Hay muchas cuestiones más, pero ésto forma parte de la vida esencial. Además también se necesita el oxígeno-terapia para toda la parte de guardia e internación. Son las exigencias mínimas y de funcionamiento para el hospital", consideró Van Opstal. Sin embargo tras la entrega de una única "cuna acrílica" que llegó a Allen como parte de la inversión en equipamiento realizado por el gobierno provincial, lo cual generó un fuerte malestar en la localidad, "todavía no tuvimos una respuesta concreta", se quejó el director del nosocomio. "Me parece prudente rever esta situación porque estamos atravesando necesidades importantes. Ésto en Viedma ya lo saben porque hemos mandado todos los reclamos habidos y por haber", se indicó además. Sin embargo y a pesar de estas condiciones, el funcionamiento del hospital "no corre peligro", se aclaró, aunque los estudios deben seguir haciéndose "con viejos equipamientos y la buena voluntad del recurso humano", concluyó Van Opstal. |
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