Sábado 17 de marzo de 2001

 

Fuertes medidas de ajuste en Bariloche

 

Fueron anunciadas por el secretario de Hacienda, Jorge Yáñez, e implican la reducción de la cantidad de personal contratado por la comuna y el aumento de tasas a las grandes propiedades.

  SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El Ejecutivo municipal está decidido a no perder más tiempo. La semana próxima lanzará un drástico plan de reformas destinado a corregir el desequilibrio financiero que incluye el despido de personal contratado y el aumento de tasas a las grandes propiedades.
Así lo anunció ayer el secretario de Gobierno y Hacienda, Jorge Yáñez, quien esta semana viajó a Viedma en busca de ayuda económica y regresó con las manos vacías.
El ordenamiento fiscal es imprescindible -dijo- para obtener financiamiento del Banco Patagonia. Un salvavidas que aparece como la única salida para afrontar la deuda más urgente con los proveedores y para poner al día los sueldos.
En realidad, las medidas anunciadas no son una sorpresa. El achique de contratados es una imposición de la ordenanza de Emergencia Económica que no se cumplió y la reforma tributaria es un viejo proyecto del intendente Feudal, postergado por las protestas de los vecinos y la falta de decisión política.
Yáñez reconoció que el déficit no baja de los 270 mil pesos mensuales y que la delicada situación nacional y provincial agrava los restricciones.
Esto podría hacer caer la promesa (verbal) del anterior equipo económico para concederle a Bariloche un ATN por 1,5 millón de pesos y también aleja la posibilidad de que la Nación absorba los planes de empleo que hoy sostiene el municipio.
"En lo inmediato estamos sin recursos", dijo Yáñez con franqueza. Indicó luego que la negociación con el banco Patagonia para obtener un auxilio financiero está encaminada pero depende de bajar el déficit.
La coparticipación que debe liquidar la provincia es un capítulo aparte. El municipio espera para la semana próxima la cuota de enero, que por esta vez podría ser el 100 por ciento de lo que le corresponde a Bariloche, y no el 70 por ciento habitual. Si entran esos 536 mil pesos, alcanzaría para pagar el martes 20 una parte importante de los salarios de febrero. "Para obtener crédito hay que mostrarse como un pagador seguro y para eso hay que hacer reformas estructurales que garanticen el superávit operativo, si no es ahora en el mediano plazo", explicó el funcionario.
Fracasado el intento de ajustar salarios reduciendo los turnos de trabajo, no quedaría entonces otra vía que los despidos.
Esa poda alcanzaría al abultado plantel de contratados, que hoy significan un gasto mensual de 170 mil pesos, cuando la ordenanza sólo autoriza 110 mil. Yáñez aceptó que hasta ahora la norma no se cumple, pero dijo que no pasará la próxima semana sin "avances concretos".
Defendió sin embargo el derecho que ejerció Feudal al contratar nuevos empleados. "Los intendentes anteriores -dijo- nombraron gente que heredaron los siguientes ¿Por qué este intendente debe aceptarlos y no puede hacer lo mismo?". La selección de quienes deban irse, opinó, "no deberá depender de quién los nombró sino de su rendimiento laboral".
Según Yáñez, también habrá una ofensiva para imponer la reforma de tasas que significará "rebajas para quienes tengan propiedades de menos de 60 mil pesos y aumentos para los grandes inmuebles".
   
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