Viernes 9 de marzo de 2001

 

Tendrán que indemnizar a un juez destituido

 

Juárez Truccone fue separado por Kloosterman.

  NEUQUEN (AN).- La municipalidad de Neuquén tendrá que pagarle casi 50.000 pesos a un ex juez de Faltas que fue destituido por decreto en 1992 por la entonces intendente Derlis Kloosterman. Osvaldo Juárez Truccone recibirá esa suma de dinero como indemnización por el daño moral que le produjo la ilegal separación del cargo.
Ello es lo que ordena un fallo del Tribunal Superior de Justicia dictado ayer por unanimidad de sus vocales.
Juárez Truccone y el otro juez de Faltas, Jorge López, fueron destituidos por un decreto de Kloosterman en septiembre de 1992. La decisión había contado con un dictamen favorable de la asesora jurídica del municipio Claudia Perino y, aunque nunca fue confirmado, en aquella época se dijo que el ministerio de Gobierno provincial había dado su aval. Los dos magistrados municipales fueron citados al despacho de la intendente y ahí se enteraron de la decisión. La idea del gobierno comunal era someterlos a un juri, pero -a juzgar por el pronunciamiento del TSJ- no eran facultades del Ejecutivo suspenderlos sino del Jurado de Enjuiciamiento. En ese momento, López y Juárez Truccone fueron acusados de ejercer sus funciones con negligencia, dolo e ineptitud.
"El estado público que tomó la situación hizo que de nada sirviera defenderme y desmentir", se quejó el ex juez en la demanda. Tanto él como su ex colega resultaron absueltos en el juri, pero Juárez Truccone renunció en febrero de 1996. "Debí soportar humillaciones, dar explicaciones sobre mi accionar a mi esposa y mi hijo, a familiares y amigos. Debí concurrir al médico y al psiquiatra, convirtiéndome en un hipertenso", detalló en su demanda contra la municipalidad.
Para Marcelo Otharán, el vocal del Tribunal Superior que argumentó la sentencia, Kloosterman "desbordó su accionar, incurriendo en arbitrariedad, pues el decreto que dispuso la conformación del jurado de enjuiciamiento, la suspensión preventiva en el ejercicio del cargo y la privación de los haberes de la actora (Juárez Truccone) aplicó normas jurídicas erróneamente".
Lo que hizo la ex intendente "rayan en lo temerario", criticó con dureza el vocal Otharán. Opinó además que Kloosterman actuó sin mesura ni prudencia, "virtudes ínsitas en todo accionar estatal".
"En base a las consideraciones expuestas, entiendo que se encuentra sobradamente acreditada la antijuridicidad del accionar administrativo, generador de la obligación de reparar los daños y perjuicios ocasionados". A esta opinión de Otharán adhirieron los otros vocales, aunque Arturo González Taboada lo hizo con una aclaración: "el Jurado de Enjuiciamiento es el único ente facultado para producir la separación, la suspensión o cesantía de los jueces de Faltas.
Paradójicamente, Kloosterman fue suspendida y luego destituida dos años después del episodio con los jueces de Faltas. Pero en su caso, las sanciones fueron resueltas por los dos tercios del Concejo Deliberante.
Casi 9 años después, durante los que pasaron cuatro intendentes, la municipalidad acaba de ser condenada a pagarle a Juárez Truccone 20.000 pesos más abultados intereses de indemnización por daño moral.
   
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