Jueves 1 de marzo de 2001

 

En abril concluirán el puente de Balsa Las Perlas

 

La empresa constructora terminó ayer con el último tramo de hormigón. Las provincias serán las encargadas de construir los terraplenes de acceso al puente de 173 metros de longitud.

  NEUQUEN (AN).- Falta poco para que los pobladores del paraje Las Perlas cambien balsa por puente. A fines de abril la empresa que tiene a cargo la construcción de la estructura concluirá con su parte de la obra. Sólo restará que las dos provincias terminen los terraplenes y las tareas de embellecimiento para que el sueño de Miguel Lembeye una al paraje rionegrino con Neuquén.
Ayer, la empresa constructora Magagement -contratada por Cotravi- terminó el último tramo de hormigón del lado de Río Negro.
Al puente de casi 173 metros de largo le faltan: los accesos, la carpeta asfáltica, defensas vehiculares, sendas peatonales, iluminación y pintura.
El puente de Balsa Las Perlas es conocido como "puente Lembeye", ya que el pediatra que vive en el paraje -todo un personaje- fue quien posibilitó su construcción. El médico le ganó un juicio al Estado rionegrino por una disputa de tierras y decidió invertir los 2.000.000 de pesos en la obra.
Las provincias serán las encargadas de aportar 600.000 pesos en concepto de Impuestos al Valor Agregado y también de la construcción de los terraplenes.
Viarse (Vial Rionegrina Sociedad del Estado) emprendió esta tarea hace tres semanas. Pero, del lado neuquino todavía no se registraron movimientos.
El inspector de Viarse Juan José Navarro, señaló que "cada provincia debía hacer su proyecto para los accesos al puente, ya que las topografías son distintas". En el mismo sentido, indicó que el movimiento del suelo que debe hacerse en suelo rionegrino es "menor que el que tendrá que realizar Vialidad Provincial de Neuquén".
El camino del lado de Río Negro tendrá 11 metros de ancho, con banquinas incluidas, y empalmará con la ruta de acceso a Balsa Las Perlas y al sur con la Ruta Provincial 7.
Parados sobre el puente -a nueve metros de tierra firme-, Navarro y el jefe de obra, Carlos Brunstein, contaron ayer a "Río Negro" los detalles técnicos de la construcción. Y también hablaron de las tareas destinadas a embellecer el gigante de cemento que desplazará de sus funciones a la balsa "La Gayega".
El transporte de Prefectura Naval, que forma parte del paisaje cotidiano de los pobladores del paraje, realiza cinco viajes -ida y vuelta- por hora, entre las 7 y las 23.
Brunstein contó que a los 18 pilotes que sostienen la estructura de hormigón los acompañarán 7 columnas más que cada 28 metros serán las encargadas de iluminar el puente. Los pilares de luz serán colocados sólo de un lado de la obra, ya que "es para lo que alcanza", completó Navarro.
La obra fue construida en seis tramos de 28,70 metros y un tramo en cada margen del Limay de 6 metros más.
En el paraje Las Perlas, que depende de la municipalidad de Cipolletti, viven más de 1.200 personas. Sus habitantes festejan el puente, ya que "si no cruzas antes de las 11 de la noche te quedás del otro lado", cuenta Clara mientras riega sus plantas.
Otros, como Susana, temen que el puente rompa con la tranquilidad y la seguridad de la que disfrutan los lugareños. "Ahora dejamos todo abierto y no tenemos problemas de robo", aseguró la vecina. Camilo, dueño de un kiosco, espera que el puente transporte trabajo. "Como en todos lados la mano viene dura", señaló el vecino que deberá mudar su local tres cuadras, porque "si se va la balsa, este sector va a quedar muerto".
   
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