Israel respondió con dureza a la ola de atentados palestinos

JERUSALEN. - Israel lanzó ayer ataques aéreos contra las fuerzas de seguridad palestinas matando a dos personas e hiriendo a decenas, en represalia por un atentado suicida de un extremista islámico que mató a dos adolescentes judíos.
Helicópteros artillados dispararon misiles en la Franja de Gaza y la ciudad cisjordana de Ramallah, incendiando edificios y vehículos.
El objetivo de los ataques fueron los cuarteles centrales de "Fuerza 17", el cuerpo de seguridad del líder palestino Yasser Arafat, al tiempo que dispararon contra otros objetivos en la Franja de Gaza.
Al menos un efectivo de "Fuerza 17" murió y otros diez palestinos resultaron heridos como consecuencia de estos ataques. El cuerpo de seguridad es acusado por Israel de numerosas acciones contra tropas israelíes y colonos judíos en los territorios ocupados. Además, una mujer palestina murió cerca de Ramallah al quedar en medio del fuego cruzado entre militantes palestinos y soldados israelíes.
Israel lanzó la ofensiva horas después que un extremista suicida hiciera estallar una bomba en una parada de autobús escolar cerca de la frontera con Cisjordania, matando a dos adolescentes judíos. (ver aparte)
El ataque se inscribió en una creciente ola de atentados que acompañan el levantamiento iniciado por los palestinos en septiembre, luego que se estancaron las conversaciones de paz.
Expertos en explosivos desactivaron otras dos bombas, mientras grupos extremistas palestinos se responsabilizaron por el atentado.
Este fue el tercer ataque en el plazo de 24 horas que vivían los israelíes. En la víspera, dos bombas en Jerusalén habían dejado un muerto y 35 heridos. Estos hechos se sumaron a la muerte el lunes de una niña israelí de tan sólo diez meses en Hebrón por un francotirador palestino.
Era demasiado para el premier, derechista, de 73 años, sobre todo para su posición ante la opinión pública.
De modo que Israel embistió por aire y tierra sobre los territorios ocupados. "Aquí reina un caos total", declararon testigos desde Ramallah .
Arafat logró ordenar a tiempo la evacuación del edificio de gobierno en Ramallah tras haber recibido una advertencia sobre el ataque. Un asistente condenó los ataques como una "agresión injustificada" . "Esto muestra las reales intenciones de este gobierno que se rehusa a reanudar las conversaciones de paz y busca hacer arrodillarse a los palestinos ", dijo Ahmed Abdel Rahman.
En una reunión de urgencia con sus principales ministros, el premier explicó que su decisión de atacar tenía el objetivo de evitar que sigan muriendo civiles israelíes. Sharon llamó al líder palestino "cabecilla del terror" y remarcó su responsabilidad por la violencia. El gabinete le dio poderes especiales para continuar con las represalias e intentar atajar así la ola de violencia.
En tanto, la cumbre árabe en Jordania instó al despliegue de una fuerza internacional para proteger a los palestinos y exigió enjuiciar a "criminales de guerra" israelíes. También decidió donar 240 millones de dólares en ayuda de emergencia a los palestinos. (EFE/Reuters/DPA)

EE. UU. vetó una fuerza de paz

MOSCU (Reuters) - Estados Unidos vetó el martes por la noche una resolución apoyada por la mayoría de los países del Consejo de Seguridad de la ONU que en la que contemplaba la creación de una fuerza de observadores para proteger a los palestinos en Gaza y Cisjordania.
La votación fue 9-1 con cuatro abstenciones y Ucrania sin voto. A favor estuvieron Bangladesh, Colombia, Jamaica, Mali, islas Mauricios, Singapur, Túnez, Rusia y China. Se abstuvieron Gran Bretaña, Francia, Irlanda y Noruega.
"Estados Unidos se opone a esta resolución porque es desequilibrada, poco práctica y por lo tanto poco sabia", dijo el representante estadounidense, James Cunningham, al Consejo.
Moscú dijo ayer que lamenta que Washington haya utilizado su poder de veto para enterrar la resolución . Rusia votó a favor de la creación de esa fuerza para observar una región en la que murieron unas 420 personas en los últimos seis meses. "La creciente ola de violencia del conflicto entre palestinos e israelíes, que ha tomado ya proporciones alarmantes, exige que se tomen medidas muy estrictas para calmar la tensión y éstas incluyen la creación de una fuerza de observación internacional ", dijo el comunicado ruso.

"Vi a mis amigos despedazados"

Un nuevo atentado suicida dejó al menos tres muertos y volvió a sembrar el terror entre los israelíes.
La policía dijo que un hombre se dirigió hacia un grupo de niños israelíes que esperaban un autobús en Newe Yamin, unos 25 kilómetros al nordeste de Tel Aviv, y activó la bomba de clavos. "De súbito, un árabe llegó hasta donde estaban mis amigos. Parecía sospechoso. Luego, escuché una explosión y volví a ver", dijo Rafael Zomer, de 15 años, quien estaba también esperando el autobús blindado que los transportaría a la escuela en un asentamiento judío en Cisjordania. "Vi a mis amigos despedazados. Uno de ellos no tenía manos", dijo Zomer, quien sufrió heridas leves. Empleados de hospitales dijeron que, además de los dos muertos, un adolescente sufrió heridas graves, otro moderadas y dos más heridas leves.
Al menos 354 palestinos, 69 israelíes y 13 árabes israelíes han muerto desde que comenzó la "intifada" palestina, justo después de que Sharon, visitara un sitio sagrado en el palestino Jerusalén oriental. (Reuters)

La cumbre árabe criticó a Bush y apoyó a Arafat

Amman (dpa) - La Liga Arabe clausuró ayer su cumbre en Amman con duras críticas a Estados Unidos, un pedido para que se levanten por completo las sanciones a Libia y desacuerdos en torno a la disputa Irak-Kuwait.
En la declaración emitida al finalizar la cumbre, se renovaron las demandas árabes para que el Consejo de Seguridad de la ONU proporcione protección a los palestinos y por ello se criticó a Washington por haber vetado la resolución de Naciones Unidas que preveía el envío de observadores internacionales a Cercano Oriente.
Los líderes árabes acusaron a Israel de querer destruir el proceso de paz en la región y condenaron tanto la "agresión" directa de Israel contra los palestinos como el bloqueo y política de aislamiento impuestos en los territorios ocupados.
Los firmantes exigieron al nuevo gobierno israelí, que encabeza el derechista Ariel Sharon, continuar con las conversaciones del proceso de paz en el mismo punto en el que fueron interrumpidas. Esta es la única posibilidad de alcanzar la seguridad y la paz, dijo el secretario general saliente de la Liga Arabe, Esmad Abdel Meguid.
El nuevo secretario general de la organización será el ministro del Exterior egipcio, Amr Mussa, quien asumirá el cargo a principios de mayo.
Los palestinos obtuvieron además la promesa de que recibirán apoyo y ayuda financiera para su levantamiento, que ya dura seis meses.
Por otra parte, se exigió al Consejo de Seguridad de la ONU que levante por completo las sanciones congeladas impuestas a Libia.
Según Meguid, los países árabes ya no se sienten obligados a respetar las sanciones, ya que Libia ha cumplido todas las condiciones para el levantamiento de las mismas.
La cumbre finalizó sin embargo sin acuerdo sobre las sanciones a Irak. En el comunicado se dejaron de lado todas las propuestas que habían sido estudiadas por los ministros del Exterior de los países miembro en las conversaciones preparatorias y discutidas luego por los líderes árabes durante la cumbre.

Análisis: Una arriesgada apuesta por la violencia

En una gasolinera de la localidad de Kalkilia, frontera de Cisjordania, justamente llamada "Encuentro de paz", un atacante suicida palestino se mezcló entre un grupo de adolescentes israelíes e hizo explotar todo en mil pedazos.
Con él, se llevó a dos estudiantes religiosos, que murieron como consecuencia de la explosión, y provocó heridas graves a otros cuatro jóvenes, de entre 12 y 15 años. Se trató del tercer atentado con bomba en 24 horas.
Los expertos israelíes sostienen que el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Yasser Arafat, apunta a provocar una dura reacción de Israel, asegurarse en consecuencia el apoyo de los líderes árabes y lograr la "internacionalización" del conflicto entre israelíes y palestinos. "En este momento, los palestinos tienen un solo objetivo: conseguir una declaración de solidaridad árabe en su lucha y el envío de fondos que salven a la ANP de su ahogo financiero", consideró el analista Amos Haren. Algo de esto logró ayer Arafat: los países árabes aportarán 240 millones a la "causa palestina".
Pero no se esperaba que la respuesta llegara antes del viernes, tras el "Día de la Tierra" de los árabes israelíes y tras la cumbre de la Liga Arabe.
Conociendo la estrategia, durante días el premier israelí, Ariel Sharon, evitó responder a las provocaciones de los extremistas palestinos, pero la presión política interna era demasiado grande, y la ofensiva militar llegó ayer antes de lo esperado con bombardeos sobre Cisjordania y la Franja de Gaza.
Israel está viviendo una dura ola de atentados por parte de militantes palestinos. Los nervios de los israelíes están enervados, y los diarios muestran desde hace días fotos terribles: un día después de publicados los retratos del bebé israelí de diez meses muerto en Hebrón, los periódicos salieron a la calle con fotos sobre los últimos atentados en Jerusalén.
Todo vale en la guerra de propaganda entre israelíes y palestinos. La foto del bebé muerto por el disparo de un francotirador palestino dio la vuelta al mundo, tal como lo hizo en septiembre pasado la del niño palestino de doce años muerto en la Franja de Gaza en medio del fuego de soldados israelíes. La cancillería israelí está por ello "conforme" con la difusión mundial de la imagen.
La derecha de Israel, que esperaba una dura mano hacia los palestinos por parte del nuevo primer ministro Ariel Sharon, está en parte decepcionada por la relativa cautela mostrada hasta el momento por el líder del derechista Likud. Mientras tanto, los colonos exigen cada vez con más fuerza que sean preocupados los territorios palestinos autónomos, especialmente en la dividida ciudad de Hebrón, Cisjordania. "Sharon creyó que su imagen amenazante bastaría para detener los disturbios, pero ocurrió exactamente lo contrario", porque los palestinos extendieron la violencia por fuera de sus territorios, señaló el analista Chemi Shalev en el periódico "Maariv".
Tampoco fueron alentadoras las noticias que llegaron desde de la cumbre de la Liga Arabe que finalizó ayer en Amman Los participantes nombraron al canciller egipcio, Amr Mussa, como nuevo presidente de la Liga, lo cual es visto como una posición de firmeza ante Israel. Desde hace años, Mussa insiste en que para los mil millones de musulmanes del mundo no es aceptable que el Estado judío tenga la soberanía sobre los lugares sagrados musulmanes en Jerusalén, principal escollo en las negociaciones entre israelíes y palestinos. (DPA/EFE)