Viernes 23 de marzo de 2001

 

EE. UU. y Rusia, como en la Guerra Fría

 

Washington expulsa a 50 diplomáticos por "espionaje" y Moscú toma represalias

  Washington/Moscú (dpa).- El conflicto entre Estados Unidos y Rusia por el tema del espionaje se agudizó ayer debido a que Washington informó oficialmente la expulsión en breve de cuatro diplomáticos rusos del país y Moscú anunció que hoy tomará represalias.
El Departamento de Estado comunicó ayer que declaró personas "non grata" a cuatro diplomáticos, que ahora tienen diez días de tiempo para abandonar el país. Otros 46 diplomáticos deberán dejar el territorio estadounidense el 1 de julio, se anunció.
Se trata de la expulsión más numerosa desde 1986, cuando el entonces presidente Ronald Reagan echó a 80 representantes rusos del país.
El Ministerio ruso del Exterior protestó enérgicamente contra esta decisión y anunció medidas de represalia. "Esta acción hostil tiene por objeto crispar las relaciones ruso- estadounidenses y -obviamente- no quedará sin la correspondiente respuesta", dice un texto del ministerio.
Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Igor Ivanov dijo: "Nos vemos obligados a tomar medidas adecuadas". Al mismo tiempo criticó la decisión estadounidense, a la que calificó de "motivada políticamente".
"No hay ni ha habido motivos para semejante decisión", opinó Ivanov.Para el canciller, la acusación de que realizaban tareas de espionaje es inaceptable.
Estados Unidos tomó la decisión de expulsar a los diplomáticos un mes después de la detención de Robert Hanssen, agente del Buró Federal de Investigaciones (FBI), acusado de haber espiado para Moscú, con el argumento de que todos ellos estarían involucrados en este caso.Entre otras actividades habrían espiado al FBI, compilando materiales secretos de ese organismo.
Dos diplomáticos, según fuentes sin confirmar, habrían dejado ya el país, entre ellos el agregado de prensa de la embajada, Vladimir Frolov.
Hanssen habría revelado a Moscú la existencia de un túnel para actividades de espionaje que el servicio secreto de Estados Unidos había excavado bajo la embajada de Rusia en Washington.
El presidente estadounidense, George W. Bush, defendió la decisión de expulsar a los diplomáticos rusos y aseguró que se "tomó la decisión correcta".
Bush subrayó que está convencido de que es posible mantener buenas relaciones con Rusia. Existen áreas en las cuales ambos países pueden colaborar, señaló. La expulsión masiva es un ejemplo del trato "realista" de Bush con Rusia . Según fuentes del FBI, Bush usó el caso Hanssen como excusa para limitar las actividades de espionaje en Estados Unidos. Según estimaciones del servicio secreto norteamericano actualmente operan entre 200 y 400 espías rusos en Estados Unidos.
El presidente Vladimir Putin, trataría el tema en la cumbre de la UE en Estocolmo a partir de hoy.

Moscú ya tiene su lista

Moscú (EFE).- Rusia dijo ayer que tiene preparada la lista de diplomáticos norteamericanos que pueden correr la misma suerte que los cuatro funcionarios rusos expulsados por Washington y otros 46 a los que se exigió abandonar Estados Unidos hasta el 1 de julio.
"Las medidas de respuesta serán adecuadas e inmediatas", dijo a la agencia oficial Itar-Tass un alto cargo de los servicios secretos rusos, quien explicó algunos detalles de la inminente reacción de Moscú en este nuevo capítulo de la "guerra de espías".
El Kremlin reaccionó con toda rapidez a la expulsión de EE.UU. de 50 diplomáticos rusos, anunció que Moscú "responderá adecuadamente" y "sin esperar mucho tiempo", y acusó a Washington de llevar "a la Humanidad a la confrontación y la Guerra Fría". El jefe de la diplomacia, Igor Ivanov, dijo que "Rusia defenderá sus intereses nacionales de manera firme y consecuente" ante el "gesto inamistoso" de EE.UU.

Historia: El "round de las embajadas" del "86

La decisión tomada ayer por Washington de expulsar a diplomáticos rusos de Estados Unidos recuerda las medidas de represalia adoptadas en la época de la Guerra Fría entre la superpotencia norteamericana y Moscú.
El trasfondo de este tipo de acciones era la desconfianza recíproca que existía entonces en las relaciones diplomáticas entre los dos bloques -el entonces comunista, bajo la égida de Moscú, y el occidental, encabezado por Estados Unidos- que siempre estuvieron marcadas por una estrecha y cerrada vigilancia por las dos partes.
Uno de los hitos de esta guerra de nervios de la diplomacia de la guerra fría se produjo en 1986, año que se iniciaba con grandes expectativas sobre las posibilidades de un diálogo fructífero entre Estados Unidos y la Unión Soviética
El "round" diplomático se inició en setiembre de ese año con la orden de Washington de expulsar a 25 empleados de la misión soviética ante la Organización de Naciones Unidas (ONU) en Nueva York.
El motivo que adujeron las autoridades estadounidenses era la "sobredimensión" de esa misión diplomática, además de pruebas de activi- dades de espionaje de algunos de sus integrantes.
La Unión Soviética reaccionó de inmediato con la expulsión de cinco diplomáticos estadounidenses, a quienes se acusó de desarrollar actividades ilegales, no relacionadas con su tarea oficial.
En relación directa con esta medida, EE.UU. expulsó a cinco diplomáticos de la embajada soviética en Washington y del consulado general de la Unión Soviética en San Francisco y a otros 50 diplomáticos.
La reacción de Moscú no se hizo esperar. La Unión Soviética adoptó una serie de medidas de "contraataque", entre ellas la expulsión de otros cinco diplomáticos estadounidenses y la retirada de 250 empleados de la embajada estadounidense y del consulado en Leningrado.
La guerra diplomática duró entonces casi un mes, hasta que Estados Unidos puso una propuesta "de paz" sobre la mesa. Fue un duro combate que tuvo otro hito en los casos de acusación por espionaje del funcionario soviético de la ONU Guennadi Sajarov en Nueva York y del periodista estadounidense Nicholas Daniloff, detenido en Moscú.
Los esfuerzos negociadores para reducir la escalada diplomática llevados a cabo entre los entonces presidentes Ronald Reagan y Mijail Gorbachov acabaron en fracaso en octubre de 1986 en Islandia, debido a las diferencias insolubles sobre el programa de defensa espacial "guerra de las galaxias", de Reagan.
(DPA)
   
    ® Copyright Río Negro Online - All rights reserved    
     
Tapa || Economía | Políticas | Regionales | Sociedad | Deportes | Cultura || Todos los títulos | Breves ||
Ediciones anteriores | Editorial | Artículos | Cartas de lectores || El tiempo | Clasificados | Turismo | Mapa del sitio
Escríbanos || Patagonia Jurásica | Cocina | Guía del ocio | Informática | El Económico | Educación