Lagos descarta una ley de "punto final" en Chile

El presidente chileno está en favor de darle una salida política al tema de las violaciones de derechos humanos en la dictadura, pero descartó cualquier traba para que la Justicia investigue.

SANTIAGO de CHILE - El presidente Ricardo Lagos dijo ayer que es fundamental que la sociedad chilena resuelva el tema de los detenidos desaparecidos durante la dictadura y que es allí donde deben focalizarse los esfuerzos políticos, pero descartó que el gobierno impulse una ley de "punto final" para dichos casos.
El presidente de Chile dijo que si bien tiene claro que en algún momento tendrá que proponer al país una fórmula para solucionar los hechos referidos a los derechos humanos, ésta no contemplará una ley de "punto final".
El mandatario advirtió que una decisión política sobre este asunto no puede interferir en los tribunales de justicia "porque sería violentar la situación".
En una entrevista radial, Lagos manifestó que todo aquel que haya sentido que sus derechos humanos fueron violados durante el régimen que encabezó Augusto Pinochet, entre 1973 y 1990, puede acceder a los tribunales.
Sin embargo, diferenció a las víctimas de torturas, que no llegaron a la muerte, de aquellos casos de personas cuyos cuerpos no han sido encontrados.
"Lo fundamental, y donde hemos puesto el esfuerzo, es en el caso de los detenidos desaparecidos, porque ése sí me parece que es un tema que tenemos que ser capaces de resolver", dijo Lagos.
En las últimas semanas se presentaron querellas por torturas contra el segundo hombre de la Fuerza Aérea chilena, el general Hernán Gabrielli, lo que causó conmoción en esa rama armada y en el gobierno, dado que se teme que se abra una serie de nuevos procesos contra uniformados por delitos sin resultado de muerte.
"No podemos decir a alguien que fue torturado que no vaya a exigir justicia a los tribunales. Sin embargo, eso queda en la conciencia de cada uno", dijo
Varias decenas de militares se encuentran actualmente procesados en los tribunales de justicia por casos de violaciones a derechos humanos, como desaparición forzada de personas o asesinatos políticos.
El mandatario afirmó que el país debe ir cerrando las heridas del pasado y centrar su interés en el futuro, argumentando que ya existen suficientes pruebas de un avance de la verdad y la justicia.
"Junto con verdad y justicia, tiene que haber una etapa siguiente de decir: bueno, tenemos verdad, tenemos justicia, ahora veamos cómo hacemos un Chile distinto", añadió.
"No llego aquí a administrar nostalgias del pasado, es una frase que sí la siento mucho", dijo Lagos. "Y mirar el futuro quiere decir que también tenemos en un instante que perdonar". (EFE/Reuters)

Foto: Manifestantes chilenos siguen aguardando el fallo sobre el procesamien-to a Pinochet, mientras crecen las versiones de una salida política al tema.