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Miércoles 28 de marzo de 2001 | |
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Juzgan a un menor por un crimen en Zapala |
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El hecho se produjo en diciembre y la víctima fue un taxista de esa ciudad. Las audiencias serán a puertas cerradas. El detenido está alojado en un hogar neuquino. |
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| ZAPALA (AZ)-El menor acusado de asesinar, junto a un cómplice, al taxista César Morales en diciembre del año pasado en esta ciudad, será juzgado a partir de hoy de acuerdo con lo que estipula la ley 2302. El joven, que permanece internado en un hogar de menores de la capital neuquina, afrontará esta causa que busca determinar su responsabilidad en el hecho que conmovió a la opinión pública local. De ser hallado culpable no recibirá sentencia condenatoria, pero deberá permanecer detenido y podrá ser enjuiciado posteriormente cuando sea mayor de edad. El procedimiento judicial es novedoso, ya que la nueva legislación de minoridad entró en vigencia a fines de 2000. En un juicio que no registra antecedentes en esta circunscripción, se intentará conocer el rol que tuvo el menor en la muerte de César Morales. El tribunal de enjuiciamiento será encabezado por el juez Hector Trova y tomará intervención la fiscal adjunta Marta Baylon. En tanto, la defensa del detenido será ejercida por la letrada oficial Beatriz Ambroggio y la defensora de los derechos del niño, Gabriela Calaccio. A diferencia de procesos orales habituales, éste no será público y el órgano de apelación estará enmarcado dentro del Tribunal de Casación. El proceso se iniciará hoy en una dependencia judicial de esta ciudad y se prevé que se extienda por al menos dos jornadas en virtud del desfile de testigos que comparecerán ante el tribunal. El caso repercutió profundamente en la comunidad zapalina por el alto grado de ferocidad que demostraron los asesinos del taxista. El hecho se produjo en las primeras horas del 1 de diciembre pasado cuando Morales fue inducido por dos pasajeros a dirigirse hacia el paraje Los Catutos. Luego de haber recorrido unos 5 kilómetros por la ruta nacional 22 fue obligado a desviarse por un camino secundario donde posteriormente recibió siete balazos de calibre 22, cinco de los cuales impactaron en la cabeza. Investigaciones posteriores arrojaron datos concluyentes y el menor fue detenido casi en for-ma simultanea con Carlos Alberto Currumil, un joven de 18 años con domicilio en el barrio Don Bosco, sindicado como el cómplice. La recolección de pruebas que los pesquisas efectuaron sumó gran cantidad de elementos que terminaron por complicar aún más la situación de ambos detenidos. Un testigo aseguró haber observado en la madrugada del asesinato cómo dos personas, cuya descripción coincidía con los jóvenes, regresaban caminando de prisa hacia la ciudad provenien-tes del lugar del crimen. Otro testimonio señaló que el menor había confesado el hecho y esta versión se afianzó luego de conocerse el resultado positivo en la prueba de parafina que se le practicó. Además se comprobó que los arbustos que tenían adheridos en la ropa los involucrados eran idénticos a los hallados en el escenario del hecho. Pocos días atrás el joven protagonizó en Neuquén una huida del hogar Suyai pero luego regresó voluntariamente. |
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