El video complicó más a los imputados

La cinta registrada por las cámaras de la sucursal cipoleña despejó dudas al compararla con el aportede nuevos testigos. Hoy están los alegatos.

ROCA (AR).- Luego de la confesión de Diego Fernández en el primer día de juicio por el asalto a la sucursal cipoleña del Banco Río, la cinta de video registrada por las cámaras del local y el testimonio ofrecido ayer por nueve testigos, comprometieron aún más la situación de los cuatro detenidos.
La llegada a los tribunales roquenses de los implicados en la causa ocurrió después de una difícil noche. Dos de los juzgados denunciaron haber sido virtualmente "colgados" de una ventana en la sede del Bora, no recibir alimentos y ser golpeados en reiteradas oportunidades (ver aparte).
Entre los testimonios importantes que escucharon ayer los jueces de la Cámara Tercera del Crimen estuvo el del guardia de seguridad que vigilaba el banco la fatídica mañana del 7 de junio de 1999. El hombre describió que los tres delincuentes ingresaron juntos, le hicieron un comentario sobre un vidrio que se había roto a la mañana y de inmediato le advirtieron que se trataba de un asalto.
"Quedate tranquilo viejo, en dos minutos nos vamos", le habrían expresado los asaltantes luego de quitarle el arma y hacerlo sentar.
Para que su relato sea más preciso, los jueces decidieron mostrarle al guardia la cinta grabada por las cámaras de la sucursal en el momento del asalto. Allí se observa claramente la entrada de la banda y el momento en que dos de ellos saltan hacia el otro lado de las cajas. El guardia agregó en su declaración que el que estaba junto a él en la puerta era quien daba las órdenes y tenía chaleco antibalas. Cabe recordar que Diego Fernández reconoció el lunes que él era el único que contaba con esa protección.
Luego, el encargado de vigilancia afirmó que el delincuente que estaba junto a él salió del banco disparando con dos armas. Esto motivó que Fernández pidiera ampliar su declaración y lo negara. "Sólo llevaba un arma, si hubiera sido de otra forma lo habría dicho", sostuvo.
Por su parte, un empleado del banco aseguró que uno o dos meses antes del atraco, había visto a Chacón en la sucursal y que lo reconoció porque jugaban al fútbol en el club San Martín en su adolescencia. El testigo agregó que en durante el minuto y 59 segundos que duró el hecho pudo escuchar que a uno de los delincuentes lo llamaban "Tano".
También declararon ayer la hermana y un vecino de Julio Fuentes, el dueño de la casa del barrio Mitre en la que se refugió la banda luego de encontrarse con Chacón y cambiar de auto. La hermana de Fuentes dijo que llegó a la casa cuando los asaltantes escapaban hacia la casa posterior (pudo ver a dos), mientras que el vecino afirmó que Julio Fuentes fue a su casa muy nervioso y enojado porque "Chacón lo había metido en un problema". Ambos confirmaron la presencia del Escort bordó tapado con una manta en la casa.
Por su parte, un taxista señaló ser amigo del joven cipoleño implicado y contó que tuvo a su cargo el Peugeot 106 dos días, hasta que Chacón regresó con un Escort bordó. También dijo que le pidió alojamiento para "unos amigos que iban a pescar a Bariloche"
Entre los nueve testigos de ayer hubo uno que afirmó ver salir a una persona del banco, de 1,80 metro de altura, "a los tiros". El hombre añadió que mientras se protegía detrás de un auto, vio a una persona disparar "a mansalva" contra alguien que estaba en el piso, que luego se enteró que era policía.
La jornada de hoy será importante, ya que resta conocer el relato del agente Luis Campos, quien resultara gravemente herido al llegar al banco. Además se esperan nueve testigos más, que declararán previo a la lectura de los alegatos por parte de la Fiscalía y la defensa.

Los detenidos denunciaron agresión del BORA

Los detenidos Diego Fernández y Ariel Giannerini dijeron pasar una noche muy difícil en la sede del Bora en Roca. Según expresó su abogado, Martín Rodríguez, allí los mantuvieron "colgados" a una ventana con esposas desde que los retiraron de los tribunales -a las 13 del lunes- hasta la mañana de ayer, cuando los trasladaron de nuevo a la Cámara Tercera para la segunda audiencia. Los detenidos, siempre según el relato de su defensor, habrían sido golpeados en varias oportunidades y durante todas las horas que pasaron allí no habrían recibido alimento.
Esta situación generó la presentación de una denuncia ante el Juzgado de Instrucción 6, a cargo de Margarita Carrasco.
Además, Rodríguez pidió al tribunal que juzga a sus defendidos que no fueran trasladados nuevamente al Bora luego de la audiencia de ayer. Este pedido fue tenido en cuenta por los jueces, quienes dispusieron el retorno a la U-9 de Neuquén.
En referencia al desarrollo del juicio, el abogado de los detenidos bonaerenses indicó estar conforme, porque casi todos los testigos declararon lo mismo que Fernández y eso permitiría alivianar la pena para alguno de los tres. (AR)

Foto: El momento en que los asaltantes superan el mostrador fue captado en forma perfecta por las cámaras. Los jueces se lo mostraron al guardia del Río.