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Martes 20 de marzo de 2001 | |
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Brutal asesinato de un joven en barrio neuquino |
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Un hermano de la víctima, quien también fue brutalmente golpeado, reveló entretelones de una vieja disputa, por motivos poco claros. La pelea fatal fue presenciada por familiares. |
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| NEUQUEN (AN) - El brutal y sangriento asesinato de un joven de 20 años conmovió a los vecinos de las manzanas 35 y 36 del barrio San Lorenzo, cuando caía la tarde del domingo. La víctima fue apuñalada y golpeada con saña, en diversas partes de cuerpo, y murió a lo pocos minutos ante la impotencia y desesperación de sus familiares, quienes ante la demora de la ambulancia se encargaron de llevarlo al hospital. Un hermano que quiso defenderlo también recibió un severo castigo y resultó gravemente herido, fue el encargado de revelar dramáticos entretelones de la tragedia. Confesó que había sido él quien tuvo el primer encontronazo con los agresores, relató viejos enconos con los atacantes y el reclamo reciente de un intercambio no saldado. Se conocen de siempre y viven separados por pocas cuadras. La víctima fue identificada como Emilio Valdebenito, quien entre las numerosas heridas que recibió presentaba un puntazo que le atravesó el pulmón. Su hermano Pablo, de 19 años, también fue blanco de la violencia desenfrenada de los agresores, cuatro hombres y una mujer, según este último. La pelea ocurrió minutos después de las 20.30, frente mismo a la casa de los Valdebenito, en una estrecha calle de la manzana 36. Hasta anoche había tres hombres detenidos, acusados de intervenir en la riña, pero fuentes policiales confiaron que habría varios más implicados en el hecho. "Me habían dicho que vendrían a hacernos "mierda", sin importarles que hubiera chicos ni nada. Hace unos tres años ya habíamos tenido una pelea con ellos. Pero lo del domingo comenzó como a las tres y media, cuando me crucé con el "G...". Me reclamó una bici, me tiraron piedras y me la quisieron dar, pero me vine a mi casa", dijo Pablo a "Río Negro", con voz apenas audible, con el rostro tumefacto y dolorido por el castigo recibido. Contó que los agresores, a quienes identificó por nombres y apodos, cumplieron su promesa de venir a agredirlos. "Yo estaba en la vereda cuando los vi venir, provocaron y tiraron piedras. Lo agarraron a mi hermano y le empezaron a pegar. Quise salir a defenderlo pero mi papá me frenó, hasta que me zafé y los peleé", relató el joven. Peleas anteriores Reconoció que ya en una ocasión anterior habían tenido una pelea con algunos de quienes los agredieron el domingo. También que le reclamaron una bicicleta que supuestamente le adeudaba a uno de ellos. Un integrante de la familia sumó su relato dramático del episodio: "Emilio estaba tendido en medio de un charco de sangre, una camioneta policial pasó y no quiso detenerse. Llamamos tres veces para que vinieran y hasta fuimos a la comisaría, pero fue como si nada". No menos dramáticos fueron los relatos de algunos de los vecinos sobre el episodio. "Se peleaban a cuchillazos y cadenazos. Ya se habían enfrentado otras veces. Acá a los vecinos no nos molestan, pero la verdad que los vemos que toman vino o cerveza en la calle", dijo un hombre a "Río Negro". Añadió que el problema de los jóvenes del sector es siempre el mismo: están mucho tiempo sin hacer nada, empiezan a beber y como resultado surgen las peleas. |
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