Martes 13 de marzo de 2001

 

Se define la ayuda para ganaderos neuquinos

 

Esta semana el gobierno dará a conocer cómo entregará el subsidio.

  El jefe de Gabinete del Neuquén, José Brillo, se juntó ayer con toda la información elaborada por los ganaderos de la provincia para analizarla y dar las últimas puntadas antes de lanzar el plan de ayuda por 10 millones de pesos anunciado oportunamente para el sector por el gobernador Jorge Sobisch.
La propuesta de los ganaderos privados contempla que, de los 10 millones disponibles como subsidio para la actividad, el 50% de esos fondos se destine a pequeños productores (en general crianceros de bajos recursos) y el resto a ganaderos que están integrados comercialmente.
En forma extraoficial, trascendió que el ministro autorizará en esta semana los desembolsos prometidos.
"Consideramos ésta una alternativa razonable para poder mantener en pie esta importante actividad en la provincia", sentenció Ricardo Dorcazberro ante una consulta de este medio.
La idea presentada por los productores a los funcionarios neuquinos prevé el desembolso de 3,3 millones de pesos por año durante tres temporadas.
Sin embargo, los ganaderos entienden que con sólo tres años no se puede revertir la crítica situación del sector, por lo que apuntan a consensuar un plan con un plazo de ejecución de 10 años, buscando recomponer el actual stock ganadero y fundamentalmente aumentar la cantidad de hembras en los campos.
La ganadería neuquina hoy cuenta con unas 150.000 cabezas de vacunos.
Anualmente unos 27.000 terneros neuquinos se derivan hacia los distintos campos de Buenos Aires y, en menor medida, Río Negro, para ser terminados comercialmente y finalizar su ciclo faenados fuera de la provincia.
Actualmente la oferta de carne neuquina abastece cerca del 4% del total del mercado local, el que llega a un consumo promedio de 34 millones de kilos por año.
Cabe recordar que hasta hace tan sólo diez años esa proporción llegaba al 27%, pero eran tiempos en los que la barrera sanitaria controlaba el ingreso de carne a la región.
La idea de los productores es retener una parte importante de estos terneros para ser terminados y faenados en Neuquén.
"Buscamos un producto orgánico, un producto diferencial para ser ofertado en las góndolas de los supermercados y carnicerías tradicionales", destacó Dorcazberro en otra parte de la conversación.
El proyecto del sector privado prevé la puesta en marcha de engorde de animales a corral cerrado (feed-lot) con una capacidad promedio de unas 10.000 cabezas anuales para llegar otra vez a ostentar el 25% del mercado de carnes neuquinas.
El subsidio al que acceden los ganaderos va a repercutir favorablemente en los costos de producción, pudiendo de esta manera competir con la importante cantidad de carne que viene del norte del país.
"La oferta de un producto diferencial no va a ser trasladada al consumidor, el subsidio es el que absorbe estos mayores costos", destacó el ganadero consultado por "Río Negro".
Pero si bien el proyecto que contempla este importante subsidio, de cerca de 100 pesos por cabeza faenada, apunta a posicionar la ganadería regional, nada dice de cómo se mantendrá la misma en el tiempo una vez que estos fondos dejen de existir para los ganaderos.
   
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