"El simplón", un llamado a la emoción
"El simplón" es una pieza que retrata los avatares y peripecias de una familia siciliana. Interpretada por Alejandro Magnone y dirigida por Carlos Demartino, se presentará hoy en Roca.
La anécdota principal retrata las peripecias de un abuelo sordo y enfermo, su nieto y una hija que recolecta achicoria en el campo, unida a un hombre muy débil. Es el retrato de una familia siciliana que se enfrenta a la necesidad de sobrevivir.
Es un unipersonal dirigido por Carlos Demartino y protagonizado por Magnone, con la asistencia de Alejandro Zanga.
Este artista que se formó con Raúl Serrano, explica que la pieza "gira en torno de seis personajes, tres que son principales y hay un relator que va contando e indicando cuál es cada personaje, pero después llega un momento que pasa a hacer los personajes".
A criterio de Magnone, la historia, "tal vez a nosotros se nos repite por la falta de trabajo, el poco dinero y las prioridades como comprar comida, que no alcanza, hay un abuelo que come mucho es muy grande y el dilema es darle de comer al abuelo o a los otros".
El artista, que es profesor de teatro en la UADE, rescata que el autor de la pieza, "sin resaltar ni subrayar nada, marca lo contrario de esas situaciones o gente por la que uno no daría nada, nos pueden dar una gran enseñanza y hay una gran humildad, un gran mensaje humano".
"Justamente cuando un obrero -considerado insignificante e ignorante- empieza a hablar sobre las cualidades del elefante, todos lo miran desde otro lugar y aprenden de él y hay algo en los animales que es muy noble", subraya el joven artista que tiene en su haber la dirección de obras como "Sobre el daño que hace el tabaco" y "La rosa tatuada".
Para Magnone, la pieza escrita por Elio Vittorini y dirigida por Carlos Demartino, genera una extraña alquimia de sensaciones en los espectadores. "Es mezcla de alegría y emoción y también es tierna a la vez", asegura su protagonista.
En la elección de esta pieza que fue adaptada por Magnone, para el actor jugaron a favor "la sangre italiana que siempre tira y también como artista me gustó la historia del abuelo, que es como un homenaje para hablar de mis abuelos, que tienen algo que ver con la historia del sufrimiento de la guerra".
Luego de su estreno en Buenos Aires, la reacción del público de todas las edades sorprendió al actor. "Yo pensé que era un tema que se daba más para la gente adulta, pero vi que muchos jóvenes, que tienen veinte años y les encanta la temática, porque a ellos les gustaría irse a Europa", resalta.
Con un raid que incluyó el estreno en el Centro Cultural San Martín, "con una reacción fantástica de la gente", la pieza recibió excelentes críticas de la prensa especializada que la calificó como una obra "cálida y evocadora".
Para el actor la clave del éxito de "El simplón" pasa por la dinámica particular que ésta genera con el público. "Es un actor jugando con el público a imaginar esta historia, porque hay mucha relación con la gente, que no es que participa, pero tiene una especie de relación con el actor, y hay un ida y vuelta, entonces cada espectador se hace su propia historia y se emociona por eso, porque es partícipe de la historia que estuvo asistiendo".
Sobre la adaptación que hizo del cuento de Vittorini, Magnone aclara que el autor italiano "no escribió teatro, sino cuentos y otros textos que reflejan su ideología: él era antifascista, estuvo en la reconstrucción de Italia, del "45 al "60, militó en el comunismo, era muy luchador y en las obras se transmite su pensamiento que habla de hombres nuevos y del arte para liberar al hombre".
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