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Las obras más conocidas –a nivel popular- de Pettoruti hacen referencia casi siempre a sus arlequines y músicos, más cercanos al cubismo o el futurismo, pero esta muestra compuesta por 37 obras nos propone volver sobre la relación que el pintor mantuvo con la abstracción hasta el fin de su vida, del cual se cumplen este año exactamente cuarenta años. Se ven aquí collages, óleos y acuarelas realizadas en esos 35 años de trabajo, provenientes de colecciones privadas y públicas como el MNBA, el Museo Sívori, el Museo Castagnino, entre otros, e instituciones estatales como la Cancillería argentina.
Su curadora, sostuvo que "se van a cumplir 40 años del fallecimiento de Pettoruti y noté que se estaba trabajando mucho en Argentina el arte concreto pero Pettoruti quedaba fuera de las discusiones y relecturas. Mi idea en esta muestra fue mostrar qué era lo que él decía, a partir de su práctica artística, acerca de la problemática de la abstracción".
La colección ofrece trabajos del gran artista platense como "Armonía, movimiento, espacio", "Fuerza centrípeta", "Dinámica del viento", "Cosas de pueblo", "Ciudad país", "Naturaleza muerta" y "Las sombras". También se muestran otras técnicas menos habituales en él como el mosaico o el vitró, como "Estudio para mosaico" de 1918 y "Mosaico" de 1917.
La exhibición se completa con un catálogo de 120 páginas, bilingüe español e inglés, que incluye el ensayo curatorial "Otros papeles de trabajo. Pettoruti y el arte abstracto", a cargo de Patricia M. Artundo; y el texto "Emilio Pettoruti y la búsqueda de una estrategia propia", escrito por Marcelo E. Pacheco - curador en jefe de Malba- en 1992 e inédito hasta ahora.
En 1956 recibió el premio Continental Guggenheim de las Américas y un año después el Gran Premio del Fondo Nacional de las Artes. En sus últimos años expuso en Bonn, Berlín, Bruselas y Ginebra y representó a la Argentina en su envío a la XI Bienal de San Pablo en 1971. Ese mismo año murió.
Alguna vez había dicho: "El Arte tiene una dimensión única, lo infinito, y éste es un misterio, ese algo maravillosamente indefinido e indefinible que está más allá de nuestra ciencia, de nuestra comprensión y de nuestra verdad intelectual y física. Pues entonces, será hasta donde mi ser, mis fuerzas, mis facultades y mi capacidad intelectual digan finalmente ¡basta!".
Oscar Smoljan
Secretario de Cultura de la Ciudad de Neuquén
Director del Museo Nacional de Bellas Artes Neuquén
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