En una jugada sin duda acertada, Pablo Dacal se desprende de la amplificación para un espectáculo donde la guitarra y la voz son las protagonistas del recorrido por las canciones de su último disco, “La era del sonido”. En la previa de su presentación del sábado 30 de agosto en la Compañía de Teatro y Títeres El Biombo de Roca, el músico habló con Río Negro de su último trabajo.
“Se trata de una suit de canciones que intentan narrar algo así como el derrotero y el devenir de un joven artista en nuestras ciudades. Es un disco con una pretensión de voz plural y que apuesta mucho al vivo”. Así define Dacal su última producción que fue grabada en 2007 junto a la Orquesta de Salón, formación con la que viene trabajando desde el 2003 y con quien editó un primer disco en el 2005 (“13 grandes exitos”).
En su gira por la región, el artista se armó sólo con la guitarra y la potencia de su voz, una combinación sin desperdicios con una puesta en escena que apuesta al acercamiento con el espectador. El tocar sin amplificación es para él una ruptura necesaria con los estandartes del mercado. “Creo que los músico quedaron demasiado encapsulados en esta idea de usar los medios de amplificación. Yo trato de encontrar sensaciones en la gente mediante instrumentaciones que no sean emuladas por pedales. A mi lo que me interesa es que me escuchan sin ninguna clase de intermediarios. Siento que lo necesito para mí. Sino me queda una sensación desolada y angustiosa”.
Dacal busca aproximarse al público en sus recitales, entiende que es necesario desplegar estrategias que permitan una verdadera comunión con el artista. “Por momentos me parece que hay un menosprecio del espectador por parte del artista, y por momentos me parece que hay una tiranía del espectador. Pero ante todo hay una separación y no están compartiendo el mismo rito”.
Ahora el artista piensa dejar la Orquesta de Salón como formación estable y dedicarse más a su carrera como solista. Deja sin embargo, un camino enriquecido por la formación con la que ha recorrido diversos escenarios de Buenos Aires, una gran cantidad de ciudades del país y algunas del exterior.
En sus proyecciones a futuro se encuentra la realización de un nuevo disco para el que ya tiene varias canciones, como “Nazarena” que anticipó el fin de semana en sus presentaciones, y el título: “El progreso”. Para la realización del mismo tiene pensado cambiar la dinámica de trabajo, salir del estudio y trabajar más en su hogar con los arreglos. “Estoy medio descreído del mercado del disco. Tengo ganas de tomar medidas al respecto, como empezar a subir la música directamente a Internet”.
Pablo Dacal es un músico en constante transformación que arrancó por los caminos del rock hacia el swing o el postpunk, y que se encamina hacia un nuevo proyecto que quizá sea la síntesis de estos años de aprendizaje.
Belén Spinetta